Trucos para empezar a adelgazar antes de que termine la desescalada

Hay numerosos motivos que pueden llevarnos a tomar la decisión de perder peso, tanto si es por una cuestión médica y lo que quieres es mejorar tu salud como si lo que buscas es recuperar esos pantalones que te encantan pero que últimamente no cierran.

Lo importante es que seas consciente, una vez tomada la decisión, de que no existe una solución mágica para ayudarnos a conseguirlo y que si quieres perder peso de una forma saludable y efectiva tendrás que modificar algunos de tus hábitos de vida.

Come más frutas y verduras

Esto es algo que nos han señalado a lo largo de toda nuestra vida, pero suele costarnos un poco realizarlo, sin embargo, aumentar la ingesta de frutas y verduras puede ayudarte a perder peso.

No solo por sus vitaminas y minerales, también porque son alimentos ricos en fibra, que mejoran el tránsito intestinal y te ayuda a sentirte saciada por más tiempo con lo que evitarás picar entre horas.

Si además escoges aquellas que puedan aportarte vitamina C, como las frutas cítricas como las naranjas o los kiwis, o verduras como los pimientos rojos y el brócoli, estarás ayudando a reducir los lípidos o grasas del organismo.

Las legumbres como aliadas

Las legumbres como los garbanzos, las lentejas, las alubias... también son excelentes a la hora de perder peso, por eso no dudes en incluirlas en tu dieta. Los hidratos que contienen son de absorción lenta, por lo que tardaremos más en volver a tener hambre.

Eso sí, no las cocines con productos grasos, como chorizo o tocino, serán mejores en tu dieta si las preparas acompañándolas de verduras.

Grasas sí, pero buenas

No hace falta que huyas de las grasas, solo que escojas las que son buenas para tu cuerpo. Comer grasas no es lo mismo que acumularlas, por ejemplo, las poliinsaturadas como el omega 3 puede ayudar a reducirlas.

Puedes obtener este tipo de grasas de pescados azules como el salmón, el atún o las anchoas, o del aceite de oliva, los aguacates, frutos secos y semillas como las de girasol.

Dormir es la clave

Dormir menos de lo recomendado puede hacerte aumentar los niveles de grasa abdominal, por eso es importante que tu cuerpo descanse al menos ocho horas diarias. Si por las noches no lo consigues, prueba a recuperar la sana costumbre de hacer una pequeña siesta de 20 minutos.

Recuerda hacer ejercicio

Una vida activa es esencial a la hora de perder peso, pero también si queremos sentirnos más sanas y fuertes. Por eso hacer ejercicio físico tiene que ser fundamental en tu vida.

Si no puedes andar tanto como te gustaría, puedes realizar algunos ejercicios sencillos en casa o aprovechar que tienes el ritmo en la sangre para bailar, eso sí, dándolo todo.

¿Algo más?

Además de señalar estos puntos, que son esenciales para dar los primeros pasos de una vida más saludable, también hay otros trucos que puedes poner en práctica.

Por ejemplo, comer despacio y en platos más pequeños, así engañas a tu cerebro, que al ver el plato vacío entiende que ya has comido lo suficiente.

Las rutinas son importantes, por eso si comienzas a comer siempre a la misma hora tu cuerpo se acostumbrará y evitarás tener hambre entre comidas. Si eso sucede, opta siempre por un snack saludable, como un puñado de frutos secos, no hace falta pasar hambre.