¿La fruta engorda? Esto es lo que le pasa a tu cuerpo cuando la eliminas de tu dieta

Cambiar nuestra alimentación para hacerla lo más saludable posible mientras cuidamos nuestra línea puede llegar a provocarnos muchas dudas. Tenerlo todo claro antes de abandonar unos hábitos por otros es importante, queremos sentirnos mejor pero no poner en riesgo nuestra salud tomando decisiones erróneas.

Por todo lo anterior siempre resulta una buena idea acudir a un especialista en la materia si queremos perder peso, pero también si lo que buscamos es estar seguras de cuál es la mejor forma de conseguir sentirnos llenas de vida modificando nuestra alimentación.

Por ejemplo, puede que en alguna ocasión hayas leído que, para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo, no es bueno abusar del azúcar, pero también que la fruta lo contiene. ¿Cómo es posible que sea bueno algo que es rico en una sustancia que a la larga puede resultar dañina para nosotros?

El azúcar en la fruta

Lo primero que debemos señalar es que la fruta no es solamente azúcar, este es solo una parte de los muchos componentes que tiene. Si bien es cierto que las frutas contienen hidratos de carbono de absorción simple, es decir azúcares, estos son naturales y se comportan diferente a los azúcares añadidos que encontramos en bollerías y ultraprocesados.

Las frutas contienen una combinación de fructosa, glucosa y sacarosa, que se descompone en las dos anteriores. En el caso de la fruta, no tomamos estos azúcares solos; como hemos comentado, cuentan con otros muchos componentes, entre ellos, la fibra, que ralentiza la absorción de esos hidratos.

Eso sí, conviene destacar que esto es así en el caso de las frutas enteras. Seguro que has escuchado que es más saludable tomarlas así que en zumo. Cuando te haces un zumo, pierdes gran parte de la fibra y los azúcares pasan a comportarse como azúcares libres de rápida absorción.

¿Qué pasa si no comes fruta?

Todas las dietas equilibradas y saludables recomiendan el consumo de frutas y verduras. Es así porque sus efectos positivos en nuestro cuerpo son muchos, son alimentos cargados de vitaminas, minerales y fibras.

Las frutas son ricas en antioxidantes, que previenen el envejecimiento prematuro de la piel y son una estupenda fuente de agua, lo que nos ayuda a mantenernos hidratadas.

Su falta puede provocar deficiencias de vitaminas o minerales, pero también pude influir en que lleguemos a desarrollar enfermedades de tipo cardiovascular, digestivo, anemia, diabetes e incluso depresión. Su consumo aumenta nuestra vitalidad y nuestro bienestar psicológico.

Frutas y verduras son bajas en calorías y ricas en fibra, por lo que puedes comer más cantidad y sentirte más saciada. No consumir frutas y verduras nos invita a tomar otros alimentos que son mucho menos saludables, contienen más calorías y menos beneficios para nosotros, por lo que podría incidir de forma negativa en nuestro plan de mantener nuestra figura.