Es noticia
Menú
De cómo Nuria Pozas da vida a imperfectas y preciosas vajillas para grandes chefs
  1. Estilo
  2. Ocio
NEGOCIOS CON ALMA

De cómo Nuria Pozas da vida a imperfectas y preciosas vajillas para grandes chefs

Es una artista nata que disfruta tremendamente aprendiendo. Madrileña, afincada en Avilés (Asturias), se inspira en la riqueza que le ofrece la naturaleza para transformarla en objetos útiles que cuentan historias fascinantes

Foto: El trabajo de la ceramista Nuria Pozas es uno de los más deseados del momento. (Cortesía)
El trabajo de la ceramista Nuria Pozas es uno de los más deseados del momento. (Cortesía)

Nacer con una creatividad explosiva puede ser una bendición, sobre todo si te crías en una casa en la que te potencian esos dones innatos. Dejar que fluyan las emociones a través de las artes es para Nuria Pozas una necesidad que ha canalizado a través de la fotografía, pintura y especialmente de la cerámica, un soporte que le permite aunar sus habilidades de manera magistral.

Sus piezas son cien por cien artesanales y dignas de ser expuestas en salas de arte en Italia, Portugal, Cuba y, claro, España. De la misma forma que acogen el talento gastronómico de, por ejemplo, Dani García, quien se enamoró de sus vajillas y decidió que acompañaran a los platos de Alelí, sus restaurantes italianos.

placeholder Nuria Pozas, una 'ceramista gastronómica' cuyas piezas cuentan historias. (Cortesía)
Nuria Pozas, una 'ceramista gastronómica' cuyas piezas cuentan historias. (Cortesía)

Es experta en la técnica japonesa kintsugi, esa que repara las piezas de cerámica rotas y resalta las cicatrices con resina y polvo de oro, esa que enaltece la unicidad y la belleza de lo imperfecto. Hablamos con la ceramista que nos invita a asomarnos a su espíritu multidisciplinar, el mismo que la ha convertido en una de las más deseadas.

¿Cómo fue tu infancia?

Siempre me ha gustado todo lo que tiene que ver con el mundo del arte y la artesanía. Pintar, dibujar, esculpir, coser o crear objetos y piezas con infinidad de elementos, es algo que hago desde pequeña.

placeholder La naturaleza está presente en todas las creaciones de Nuria Pozas. (Cortesía)
La naturaleza está presente en todas las creaciones de Nuria Pozas. (Cortesía)

Mi padre era muy creativo e inventaba cosas de la nada. Mi madre era costurera, por lo que tejer, coser y todo lo que tiene que ver con los tejidos lo aprendí de ella desde muy niña. Recuerdo que en el colegio les hacía gustosamente los trabajos de dibujo y arte a mis compañeras sin que nadie se enterara.

Pintas sobre tela y cerámica, ¿qué te aporta cada material?

Sí, es cierto que lo que más me gusta es pintar. Con la cerámica descubrí que, además de ser un soporte brutal para la pintura, podía crear objetos útiles y prácticos como vajillas o piezas ornamentales, por lo que me enganché rápidamente y es un amor para toda la vida.

La cerámica me permite disfrutar de la pintura en un ambiente cotidiano, con objetos que usamos muchas veces al día y que se pueden convertir en una pieza única y especial, llena de color y con un mensaje que ofrecer.

placeholder La pintura sobre tela es otra de sus pasiones. (Cortesía)
La pintura sobre tela es otra de sus pasiones. (Cortesía)

La tela para mí es otro vehículo de expresión artística. Cuando murió mi padre necesitaba canalizar toda esa tristeza y alejarme de mi entorno por un tiempo. Me fui a Barcelona dos meses a una escuela de diseño para aprender todo lo posible del mundo de la estampación textil, pintura en seda y en otros tejidos, diseño de estampados digitales y un montón de nuevos conceptos que me abrieron un mundo maravilloso.

placeholder Las piezas de Nuria Pozas fluyen especialmente. (Cortesía)
Las piezas de Nuria Pozas fluyen especialmente. (Cortesía)

Todo eso me sirvió tanto emocional como laboralmente, pues en esa época estaba viviendo en Roma y allí no era posible desarrollar mi trabajo como ceramista, pero sí me abrí mercado con la estampación textil y el diseño de prendas. Creé una marca, Lima y Limone, exclusiva de prendas pintadas a mano y me fue muy bien. Trabajé con ella en Roma, Florencia y Milán hasta el 2015, cuando ya me dediqué a la cerámica a tiempo completo.

¿Cómo te inicias en el universo gastronómico?

Observé que la alta cocina y las vajillas estaban de moda. Me di cuenta de que podía ser un nicho de mercado potente para mí, pues el tándem de piezas utilitarias pintadas a mano que cuenten una historia es mi fuerte.

placeholder Vida, belleza y cerámica al estilo Nuria Pozas. (Cortesía)
Vida, belleza y cerámica al estilo Nuria Pozas. (Cortesía)

Aquí, en Asturias, colaboré con el colectivo A22manes, a través del cual chefs y profesionales gastronómicos dan forma a proyectos solidarios. Fue así, aportando mi granito de arena con las vajillas, conocí a un montón de chefs que se convirtieron en clientes y amigos. Mi tesón hizo el resto.

¿Cómo llegas a colaborar con Dani García?

Gracias a Silvia Pardo y su empresa ACME —con showrooms en Madrid y en Barcelona—, Quique Dacosta, El Celler de Can Roca, DiverXO o el mismísimo Alain Ducasse se encuentran entre sus clientes. La conocí en el Madrid Fusión de 2020, le gustó mi trabajo y empezamos a trabajar juntas. Ella representa mis vajillas y piezas. En sus espacios se expone el trabajo de numerosos artesanos y firmas nacionales e internacionales de cerámica utilitaria. Es el Disneyland de los cocineros.

placeholder Colecciones tan personales como delicadas. (Cortesía)
Colecciones tan personales como delicadas. (Cortesía)

En el Madrid Fusión de 2022, Dani García fue a ver a Silvia y le encantó mi vajilla para los restaurantes italianos que tenía en mente y nos pusimos a ello. En este momento estoy acabando con el pedido de un nuevo Alelí que se abrirá este 2024 en Budapest.

¿Cómo se traducen los deseos de un cliente?

Una vez que van conociendo tu trabajo, los clientes se fían de tu instinto. Hablamos para saber el uso que le van a dar a las piezas, así como el estilo del restaurante, y por lo general se dejan guiar y me permiten hacer mi trabajo con muchísima libertad. Soy especialista en lo diferente, lo imperfecto y piezas únicas, por mucho que lo intente no soy capaz de hacer dos piezas iguales, esa es mi seña de identidad.

"Quienes buscan una producción en cadena, exacta y precisa, nada tienen que hacer conmigo", Nuria Pozas

placeholder Piezas con la impronta del tacto y la sensibilidad de Nuria Pozas. (Cortesía)
Piezas con la impronta del tacto y la sensibilidad de Nuria Pozas. (Cortesía)

¿Por qué te gusta rescatar piezas rotas y olvidadas?

La filosofía kintsugi me define. Cuando sale una pieza del horno con un craquelado o una pequeña esquirla o fisura, no la descarto. Para mí esa pieza es la ovejita negra, la especial. Cierto que no todos los clientes están dispuestos a comprarla por creerla rota, lo cual no es cierto. No estamos hablando de una rotura que haga la pieza inservible, sino de una marca de nacimiento, como si fuera un lunar o un antojo.

placeholder La técnica japonesa kintsugi exalta la imperfección. (Cortesía)
La técnica japonesa kintsugi exalta la imperfección. (Cortesía)

No me interesa vender esas piezas a cualquiera. Están destinadas a ese tipo de clientes que ven el alma de las cosas y aprecian la originalidad y la belleza de lo efímero. Nacen muy esporádicamente, son objetos de lujo para mí y normalmente me las suelo quedar yo o se las regalo a mis amigos o familiares.

¿Hacia dónde te gustaría dirigir tus pasos?

Quiero seguir viviendo de mi pasión, la cerámica, tal y como lo estoy haciendo ahora, con clientes que confían en mi trabajo y me dejan hacer, disfrutando del proceso creativo paso a paso, con tiempo para viajar, aprender nuevas técnicas y vivir.

placeholder Las deseables piezas, únicas e inimitables, de Nuria Pozas. (Cortesía)
Las deseables piezas, únicas e inimitables, de Nuria Pozas. (Cortesía)

No quisiera tener que ampliar el taller y asumir empleados o grandes cambios empresariales que me harían ganar posiblemente más dinero, pero que me robarían lo más preciado que tengo, mi libertad.

Nacer con una creatividad explosiva puede ser una bendición, sobre todo si te crías en una casa en la que te potencian esos dones innatos. Dejar que fluyan las emociones a través de las artes es para Nuria Pozas una necesidad que ha canalizado a través de la fotografía, pintura y especialmente de la cerámica, un soporte que le permite aunar sus habilidades de manera magistral.

Tendencias En el punto de mira
El redactor recomienda