Arantxa Sánchez Vicario, arrepentida: "Lo di todo por amor y no fui compensada"

"Profesionalmente superó todos los obstáculos, pero le está costando mucho más superar los obstáculos de su propia vida". Con esta frase, Mamen Mendizábal comenzaba el programa de 'Palo y astilla' que ha tenido como invitada a la que es la mejor tenista española de todos los tiempos, Arantxa Sánchez Vicario.

Muy emocionada, la protagonista de esta nueva entrega ha realizado un recorrido sobre su faceta profesional como deportista de élite y, aunque no profundiza demasiado, narra la realidad del intenso drama familiar que vivió durante muchos años y que sorprendió a todo el país cuando se hizo tangible en aquella mítica rueda de prensa.

"¿Quieres sacarte de encima esa imagen de mala hija?", le pregunta la periodista. "Muchas cosas se podían haber evitado, pero ya pedí perdón en su día [...]. Pedir perdón cuesta, yo ya lo he hecho [...]. Lo que se hizo, el presente lo cambiará. Yo intento seguir luchando por tener esa unidad familiar", contesta Arantxa.

Sin embargo, cuando Mamen le pregunta si cree haber sido el motor económico de su familia, Arantxa se queda muda. Su patrimonio, cifrado hasta hace no mucho en más de 30 millones de euros, ha sido el desencadenante de la mayoría de problemas que la tenista ha tenido que afrontar fuera de la pista.

Hay que recordar que fue su padre quien desde el primer momento administró sus ganancias, y ella, según su biografía, no tardó en percibir que su familia, incluidos sus hermanos, se estaban quedando con su dinero. Un conflicto que llegó a su punto álgido cuando contrajo matrimonio con el empresario Josep Santacana y publicó el polémico libro

El programa cuenta con la participación de su hermano Emilio y su amiga Cristina, y ambos están de acuerdo en que un mal asesoramiento llevó a la tenista a publicar aquel relato en el que, en palabras de Mendizábal, retrataba a su madre como "una tirana" y a su padre como "un ladrón".

"Su libro fue el gran problema. Es surrealista, no entiendo a la persona que la influenció para vender ese libro. Es todo mentira y quien más lo ha sufrido es ella. Es una pena que haya llegado a eso", ha declarado Emilio al respecto.

El amor la llevó a enfrentarse con su familia, ya que nadie confiaba en Santacana. "Lo di todo por amor. Yo no fui compensada de la mejor manera, pero lo importante es que ahora tengo dos hijos maravillosos que son los que me dan la fuerza". De hecho, el empresario consiguió separarla de su entorno de tal forma que la deportista destituyó a su padre como administrador e interpuso varias demandas en su contra.

Ahora, inmersa en un tortuoso proceso de divorcio con Josep Santacana, Arantxa se muestra arrepentida y se emociona al pensar en el poco tiempo que han pasado sus hijos con sus abuelos y todo lo que se han perdido a causa de su distanciamiento.

Luchando por volver a la relación que tenían antes, la tenista confiesa haberse acercado a sus hermanos y mantener una gran relación con su madre, "que siempre ha estado ahí". Cuando le plantean qué es aquello que siempre quiso decir a sus padres, Arantxa lo tiene claro: "Nunca es suficiente para decirles cuánto les quieres y me hubiera gustado decirles aún más cuánto les quiero".