La familia Pujol y su relación con la cadena DIR, gimnasios rescatados por la Generalitat

Este fin de semana ha habido cierto revuelo en Cataluña porque la Generalitat ha concedido 2,6 millones de subvención a la cadena de gimnasios DIR, que cuenta con múltiples centros en todo el país. La polémica estaba servida porque la familia Pujol Ferrusola ha tenido siempre una estrecha relación con esta empresa.

Ha tenido y sigue teniendo: Josep Pujol Ferrusola posee el 3% de las acciones de esta sociedad a través de MT Tahat SL, empresa de la que es socio al 99% y consta además como administrador único en el Registro Mercantil. No es, además, la única vinculación de los Pujol con esta empresa. La matriarca del clan, Marta Ferrusola, fue la presidenta de la Fundación DIR hasta el 17 de octubre de 2015, cuando cesó del cargo.

También trabajó en la misma fundación Anna Vidal Maragall, la mujer de Oriol Pujol Ferrusola. Vidal contaba con un sueldo de unos 30.000 euros anuales. Se da la circunstancia de que tanto ella como su marido, el benjamín de la familia, estuvieron imputados en el caso de las ITV por supuestos cobros ilícitos.

Solo dos empresas

Josep Pujol Ferrusola, por su parte, será juzgado, con el resto de su familia, en la Audiencia Nacional. Su nombre aparece, junto al de su hermano Jordi, como administrador en la empresa Projectes Barcelona SL, dedicada a la promoción inmobiliaria y en la que era administrador su abuelo, Florenci Ferrusola. Es esta y la empresa MT Tahat SL, accionista de los gimnasios de la discordia, las únicas empresas a las que uno de los grandes nombres de la empresa catalana sigue vinculado.

El segundo de los hermanos Pujol Ferrusola vivió durante años en Miami, donde trabajó como consultor. Está casado con Laura Vilà Sagnier (1963), entroncada con las mejores familias de la burguesía catalana. El padre de Laura es Ramón Vilà, miembro de los Vilà Marqués, fundadores de Safa, empresa productora de fibras textiles como el nailon y el tergal. Su madre es Fefa Sagnier (se casó en segundas nupcias tras enviudar de Carlos Viladomiu), miembro de unas de las pocas familias aristocráticas de Barcelona. Juntos tuvieron cinco hijos: cuatro chicos (Ramón, Carlos, Fernando y Javier) y una chica (Laura).

El matrimonio Pujol Vilà tiene dos hijos, ya mayores de edad. Josep estudió en Londres y Nueva York, y siempre ha mostrado preferencia por hacer negocios fuera de Cataluña, porque dice que el peso del apellido, en su caso, ha sido un lastre.

Plan de viabilidad

Con toda esta información sobre la mesa, el Govern de la Generalitat ha decidido inyectar 2,6 millones de euros a la cadena de gimnasios DIR. Ya ha aportado 1,46 millones, lo que debería servir para desarrollar un plan de viabilidad y enfrentarse mejor a la caída de ingresos fruto de la pandemia y las fuertes restricciones sanitarias dictadas por la propia Generalitat.

Con todo, el accionista mayoritario de los Gimnasios DIR es la empresa Diagonal 3000 SL, de la que Ramón Canela Piqué es (casi) el único socio (tiene el 99% de las acciones). Canela es uno de los grandes empresarios del sector en Catalunya, donde posee incontables sociedades que gestionan sus centros de fitness por todo el territorio.

Desde 2016, el vicepresidente de DIR, cuya holding es Centres d’Activitats Físiques SA, es Joaquim Triadú, quien fuera en su momento una de las personas de confianza de Jordi Pujol. Triadú dejó la política en 2011, año en el que entró a formar parte del bufete de abogados Garrigues.

Su paso de la política a la empresa privada fue a lo grande: en 2011 fichó por Pricewaterhouse Coopers como socio director de la asesoría legal, y fiscal en Barcelona, ha sido asesor en el grupo Mediapro y en la actualidad, a sus 62 años, es también profesor de la prestigiosa escuela de negocios IESE. En su momento, durante el Gobierno de Jordi Pujol en 2000, fue conseller de la Presidencia, uno de los más altos cargos que se pueden ostentar en la Generalitat.