De Camila a Sophie de Edimburgo: los looks del segundo día de Ascot (con joyas históricas)

Segundo día de carreras en el histórico hipódromo de Berkshire y, como no podía ser de otra manera, el núcleo de la familia real británica se ha vuelto a convertir en el centro de las miradas del evento. Después de que ayer mismo Carlos III y Camila Parker Bowles estrenasen su título de reyes en dicha celebración, los soberanos del Reino Unido, acompañados de algunos de sus principales fieles, han querido volver a disfrutar por unas horas de la gran afición de la difunta Isabel II.

No obstante, si en la primera jornada el duelo estilístico se centraba en el terreno de los tocados, tal y como probaba la mismísima Beatriz de York con una diadema fucsia, hoy este ha pasado al universo de las joyas. Las mujeres de la institución han decidido rescatar de sus armarios algunas de sus alhajas más simbólicas para desfilar por el verde. Un gesto que quizás las lleve a formar parte del histórico de looks de Ascot, una celebración conocida por el ‘dress code’ más estricto y único del planeta Tierra.

Después del éxito de su Dior de inspiración nupcial, Camila Parker Bowles ha apostado por un diseño muy similar, pero en tonalidad rosa pastel. La esposa de Carlos III ha portado uno de sus clásicos abrigos vestidos de largo midi y silueta recta con falda ligeramente en forma de A. En este caso, con sutil escote en forma de pico, cuello camisero, hombrera redondeada y manga larga. ¿Su mayor atractivo? El remate de las costuras cuenta con pespuntes de flecos.

Para acompañarlo ha seleccionado una pamela ladeada en color amarillo pastel, la cual cuenta, a su vez, con una original forma voluminosa en el lateral de su cabeza. Sin embargo, la joya de la corona (nunca mejor dicho) se la han llevado los complementos. La monarca ha lucido un choker, reservado para ocasiones especiales, conformado por cinco collares de perlas, que se rumorea formaron parte del regalo de boda de la reina Alexandra, con un gran diamante central a modo de cierre, comprado por la propia Camila y cuyo valor se tasa en 23.000 libras esterlinas.

Su cuñada, la princesa Ana, ha querido hacerle competencia en este terreno y ha finalizado su estilismo dos piezas compuesto por una falda de tablas azul cielo y una chaqueta clásica blanca de manga francesa y cuello mao de inspiración años 50 con su broche de Cartier Aquamarine Pineflower, que originalmente formaba parte de una tiara de su madre Isabel II, pero que le cedió como regalo de bodas en 1973. Su pamela tampoco ha abandonado dicha tonalidad.

En un plano más discreto, Sophie de Edimburgo ha acudido al Royal Ascot con su diseño más Kate Middleton. La esposa de Eduardo, hermano de Carlos III, ha escogido un sofisticado y minimalista modelo midi blanco de cuello lazada, manga larga ligeramente abullonada, parte superior abotonada y falda de sutil vuelo con cinturón elaborado en el mismo tejido con el fin de potenciar su figura. Un tocado ladeado a conjunto ha sido su mejor complemento.

Por último, Zara Tindall ha apostado por una pieza similar a la de su tía política. La hija de la princesa Ana ha posado frente a los fotógrafos con un vestido azul Klein de largo midi con falda acampanada, parte superior cruzada con escote pronunciado en forma de V y manga farolillo. Para completarlo también ha seleccionado un tocado ladeado circular, pero, en su caso, en tonalidad verde aguamarina.