Trucos para conseguir un cabello más grueso y presumir de pelazo

Las abuelas son fans de inculcar el cabello repeinado en sus nietos para que estos, acto seguido, descubran que, tras la tiranía de las líneas que dibuja el peine en el cabello, hay una libertad capilar en la que el volumen es el leitmotiv.

Por desgracia, si naces con el cabello fino, tus alternativas al cabello repeinado serán dos: dejar que se repeine él solito o ponerte una diadema para desviar la atención. Al menos, esas eran las herramientas escapatorias en la infancia, pero por suerte los tiempos han cambiado y existen champús ‘salvavolumen’, cortes de pelo con movimiento y algún que otro truquillo.

Prepara la lista de la compra y dile hola al volumen porque tú, mujer de pelo fino, vas a encontrar la solución a tus problemas y lo vas a lograr con tus propias manitas.

Venerarás el champú en seco

Con esto no queremos decir que tengas que dejar de lavar tu cabello. Uno de los secretos a voces del champú en seco es su superpoder voluminizador. Agítalo y pulverízalo sobre la raíz del cabello, manteniendo una distancia de 30 centímetros. Deja que el producto absorba la grasa del cuero cabelludo durante un par de minutos y cepilla el cabello.

Champú en seco a la leche de avena de Klorane (14,50 €). Después del cepillado el cabello, además de limpio y seborregulado, adquiere más volumen y se texturiza. No deja residuos y era uno de los cosméticos preferidos de Karl Lagerfeld.

El corte con más rollo

El corte de pelo de la temporada, el shaggy, es solo uno de los estilos capilares que ayuda a crear más volumen. En general, las medias melenas y los bobs son grandes aliados ya que te aportan mucho movimiento. Al estar más corto el cabello, no cae con el mismo peso que si está más largo, lo que hace que se expanda y, voilà, volumen.

Además de llevar el pelo corto, y si no quieres renunciar a una melena más larga, siempre puedes recurrir a las capas. Jennifer Aniston o Gwyneth Paltrow son algunas de las celebs con el pelo fino que llevan el pelo largo pero juegan con su volumen. Mientras que en el caso de Aniston su cabello tiene más volumen porque sus capas son más cortas, Gwyneth apuesta por las capas largas y por ello su cabello parece más lacio que el de Jennifer.

Revolucionarios tratamientos voluminizadores

La investigación científica ha sido capaz de desarrollar champús y acondicionadores capaces de emular las mejores máscaras de pestañas voluminizadoras, renovando el el cuerpo cabelludo y revitalizándolo para que el cabello crezca más fuerte, brillante y suave, además de lograr una mayor densidad.

Pumpling Wash (29,90 €) y Pumplig Rinse (29,90 €), de Kevin Murphy. Champú y acondicionador revitalizantes del cabello, de la raíz a las puntas. Por un lado, primero, el champú, gracias al extracto de ortiga estimula el crecimiento del cabello, a través del zinc contrarresta los niveles de DHT (asociados a la alopecia androgénica) y lucha contra el envejecimiento del folículo fortaleciendo la raíz a través del ácido oleanólico de la hemsleya.

Que puede que todo esto suene a chino, pero se traduce en un aumento del volumen del cabello como resultado de la nutrición del cuero cabelludo. Si a esto le sumamos los beneficios del acondicionador Pumplig Rinse, que contiene biotina para fortalecer y manteca de karité para reparar y proteger el cabello, el resultado es el de un cabello cuidado y más densificado.

Las trenzas y los cardados no son lo que eran

¡A tricotar! No, es broma, no significa que tengas que regresar a la adolescencia. Las trenzas de raíz a modo de diadema son una gran solución para aportar volumen al cabello. Una vez hayas trenzado tu cabello, toca hacer el recogido más esponjoso abriendo cada mechón de la trenza. Así generarás más volumen.

Otra opción ganadora es el efecto cardado. Solo el efecto, nada de cardar. Los recogidos con volumen en la parte superior de la cabeza, inspirados en el estilo de los años 50-60 pueden ayudarte a crear peinados en los que parezca que tu cabello es más grueso. Peina tu melena boca abajo y luego recógela con horquillas o gomas de pelo de una forma muy poco tirante.

Y, por último, por mucho que se nos parta el corazón, hay que decirle adiós las horquillas vistas que el imperio de la moda ha impuesto recientemente. No solo embellecen, su otra secreta misión es la de sujetar el cabello, lo más pegadito al cuero cabelludo que sea posible. Así que no, no son nuestros mejores aliados.