Melena Cibeles, el corte de pelo más repetido de la Semana de la Moda de Madrid

La calle y las redes sociales dicen “volvamos a los años 90”, pero la pasarela parece decir “los 70 y los 80 eran puro glam”. Los voluminosos cortes de pelo de las divas televisivas de los noventa han seducido a plataformas sociales como TikTok, teniendo su representación celeb sobre la alfombra roja. Melenas con capas largas y flequillos Bardot, recogidas en esponjosos peinados, habían sido, hasta la fecha, la única tendencia capilar del año.

Sin embargo, llegaron los peluqueros para arrojar algo de luz con las tendencias de cortes que llevaremos en el otoño y reaparecieron estilismos como el mullet, el shag y los cortes escalonados. La Mercedes-Benz Fashion Week terminaba de confirmarnos la tendencia cuando varias modelos del desfile de Teresa Helbig coincidían, si no en el largo, en la forma y el estilo de sus cortes de pelo.

El french bob, una media melena a la altura de la barbilla, rematada con un flequillo con cuerpo y múltiples posiciones, ha evolucionado hacia un box bob -el actual look de Aitana-, incorporando capas cortas con las que el cabello se estructura. La descripción queda vacía si no se acompaña de una fotografía.

El resultado es un corte de pelo capaz de ser salvaje a la par que elegante. La textura del cabello es fundamental en la que hemos bautizado como melena Cibeles. Sea cual sea su longitud, jugar con el tipo de cabello, liso, ondulado o crespo permite ganar volumen y naturalidad, dos cualidades ampliamente valoradas en la década actual.

Cuando el largo del cabello supera la región de la barbilla, rozando el largo midi o clavicut, nos acercamos a una nueva melena shagg, con mucho más cuerpo. Durante el desfile de la diseñadora catalana, se apreciaba el movimiento que la superposición de capas de distintas longitudes aportaba a la melena Cibeles. Estas capas desordenadas se adaptan también a los cabellos más cortos, texturizando un pixie hasta conseguir que se pierdan las diferencias con el mullet.

A diferencia del shaguhila, el corte de pelo que María Bernad puso de moda en el street syle parisino, este nuevo shag no tiene escalones supermarcados, sino que sus capas están ejecutadas según el tipo de cabello de la modelo, para que se gane volumen sin recortar una estructura definida. El largo, muy fino y rozando el nuevo mullet del shaguhila, tampoco aparece en esta nueva tipología de corte de pelo, pues no hay cortes muy marcados, cada capa está perfectamente incluida en el resto de la melena.

Y si de capas, perfectamente desordenadas, va el corte de pelo más visto sobre la pasarela de la Semana de la Moda de Madrid, no podía faltar el flequillo. La melena Cibeles, sea cual sea su largo, siempre lleva un flequillo entreabierto, que no llega a sobrepasar las cejas. La idea, una vez más, es conseguir un corte de pelo que aparente desorden y 'casual chic'.

Cada mechón era moldeado para controlar su dirección y curvatura, de tal forma que se consiga un moldeado de estética setentera. El corte despuntado del flequillo permite la irregularidad que demanda el estilismo, pero también facilita que los ojos queden despejados y la mirada, por tanto, esté enmarcada. Una nueva versión del choppy bang más retro y capaz de acomodarse a cualquier corte de pelo.

Pero quizá el elemento común de los diferentes estilismos del corte más visto en Cibeles no sean ni las capas cortas, ni el flequillo, ni el sinfín de longitudes, sino el efecto 'bowl cut' o 'pageboy' desordenado de la parte superior de la cabeza. La idea era la de un favorecedor casco, con muchas vibes otoñales, que parece haber sido alborotado antes de que las modelos se lanzaran a la pasarela.

Puede incluso recordar un poco al trendy bixie de Meg Ryan en ‘Tienes un email’. Si se hará internacional o se quedará en suelo patrio, solo el tiempo lo dirá, pero de lo que no hay dudas es de que es el corte de pelo de la MBFW.