Muere la princesa Marie de Liechtenstein a los 81 años tras sufrir un infarto cerebral

Tristes noticias llegan desde la corte real de Liechtenstein. La princesa Marie Aglaé ha fallecido a los 81 años de edad. Desde el pasado miércoles, la esposa del príncipe Hans Adam II, jefe del Estado, permanecía ingresada en una clínica de Grabs (Suiza) tras sufrir un infarto cerebral. El fatal desenlace llegaba este sábado a mediodía, tal como ha confirmado la Casa Real del pequeño principado, quien ha añadido que la princesa se ha ido de forma pacífica y rodeada por sus seres queridos. Marie Aglaé era madre de cuatro hijos y abuela de quince nietos que ahora lloran su muerte, junto a Hans Adam, su querido esposo.

Marie Agláe Bonaventura Theresia nació el 14 de abril de 1940 en Praga, siendo la cuarta de los siete hijos del conde Ferdinand Carl Kinsky von Wchinitz und Tettau y su esposa, la condesa Henriette von Ledebur-Wicheln. La familia tuvo que dejar Checoslovaquia en 1945 y se estableció en Alemania. Tras realizar sus estudios allí, Marie se marchó al Reino Unido con el propósito fundamental de mejorar su inglés y posteriormente se vinculó a la Academia de Artes Aplicadas de la Universidad de Múnich, donde se graduó. Posteriormente, la princesa se estableció en París, de nuevo con el fin de mejorar su nivel de francés, y más tarde trabajó como diseñadora industrial en una imprenta de Dachau, antes de que se cruzara en su camino el que ha sido el amor de su vida.

Marie se comprometió en 1965 con el príncipe Hans Adam, quien además era su primo, ya que ambos descienden de Ferdinand Kinsky von Wchinitz und Tettau y la princesa Maria Josepha of Liechtenstein. La boda tuvo lugar el 30 de julio de 1967 en la Iglesia Parroquial de San Florián, en Vaduz, la capital de Liechtenstein. Al enlace acudieron numerosos miembros de la realeza, como la reina Sofía de España, la princesa Irene, Ana María de Grecia, los duques de Wurtemberg, el archiduque Otto de Austria y el duque de Braganza, entre otros.

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De este matrimonio nacieron cuatro hijos, el príncipe heredero Alois (11 de junio de 1968, casado con la princesa consorte Sophie), el príncipe Maximiliano (16 de mayo de 1969), el príncipe Constantine (15 de marzo de 1972) y la princesa Tatiana (10 de abril de 1973). Y tiene en la actualidad 15 nietos.

El 13 de noviembre de 1989, su marido llegó al trono de Liechtenstein tras la muerte de su padre, el príncipe Francisco José II, lo que la convertía a ella en la princesa consorte de este pequeño principado de habla alemana que está situado entre Austria y Suiza. Sin embargo, el 15 de agosto de 2004, la pareja decidió dar un paso atrás. Sin dejar de mantener el título de 'príncipe soberano', Hans Adam II consideró que había llegado el momento de dejar la regencia del país a su hijo mayor.

Hans Adam es un soberano querido, aunque ha vivido sus crisis. En el 2003, por ejemplo, el pequeño principado celebró un referéndum para conocer si era necesario que Hans Adam tuviera más poder. Él mismo amenazó públicamente con su marcha del país y la de su familia si no obtenía el benéplacito de sus ciudadanos, que finalmente le dieron todo su apoyo