La dieta infalible para que nunca te falte la energía sin engordar
Lo que comemos puede ser determinante para sentirnos con la fuerza necesaria para comernos el mundo
Una dieta adecuada es una forma estupenda de cargarnos de energía y en ocasiones es algo que no, centrándonos solo en la meta de adelgazar. Sin embargo, conviene destacar que no consumir las suficientes calorías por miedo a engordar puede hacer que nos sintamos cansadas y alicaídas.
Por ello, una dieta correcta diseñada para nosotras nos dará las calorías que necesitamos para que esto no suceda. Por ejemplo, si has comenzado a saltarte el desayuno porque crees que eso te ayudará a perder peso, replantéatelo porque no funciona.
El desayuno determinará en gran medida cómo nos sentimos a lo largo del día, por lo que debería ser completo y estar compuesto de cereales, lácteos y proteínas. Sucede algo parecido si has decidido que lo mejor es suprimir los hidratos de carbono.
Aunque se tiende a pensar que nos hacen engordar, lo cierto es que eso suele ser el resultado de las salsas y complementos que les añadimos. Los carbohidratos deberían suponer el 50 % de nuestra ingesta diaria, aproximadamente, porque aportan a nuestro organismo una fuente de energía adicional que necesitamos.
Siempre será mejor que escojas hidratos de carbono complejos, porque su absorción es más lenta gracias a su contenido en fibra. En este grupo encontramos el arroz integral, el pan y las harinas integrales, las legumbres y frutos secos, las semillas y los vegetales y frutas.
Parte del combustible que necesita nuestro cuerpo lo obtiene de las grasas, por lo que suprimirlas por completo no es una buena idea. Apuesta, eso sí, por las grasas insaturadas o buenas que puedes encontrar en pescados grasos y mariscos, aceite de oliva, aguacate o frutos secos.
Estos no son los únicos alimentos que pueden ayudarte a sentirte más fuerte y llena de energía, por ejemplo, los huevos son una estupenda fuente de proteínas y un maravilloso snack para evitar pasar hambre a media mañana o media tarde. Ayudan al buen funcionamiento de la musculatura y a reponernos tras el ejercicio.
Algo parecido sucede con el plátano, famoso por sus altos niveles de potasio. Este elemento desempeña un papel fundamental en la mayoría de las funciones del cuerpo y su déficit suele producir cansancio y fatiga.
El chocolate puro también puede ayudarte a darte un chute de energía y evitar que te sientas cansada, si necesitas energía, tómate una onza. También te sentirás mejor si incluyes en tu alimentación la avena o las espinacas, pero sobre todo no te olvides del agua.
Nuestro cuerpo la necesita para eliminar toxinas, pero también para absorber los nutrientes esenciales que nos aportan energía.
Una dieta adecuada es una forma estupenda de cargarnos de energía y en ocasiones es algo que no, centrándonos solo en la meta de adelgazar. Sin embargo, conviene destacar que no consumir las suficientes calorías por miedo a engordar puede hacer que nos sintamos cansadas y alicaídas.