6 curiosidades que aún no sabes de Leo Harlem: del lugar donde le gustaría jubilarse a su desconocida pareja

Panadero, estudiante, camarero y, finalmente, monologuista. Así se podría resumir la vida profesional de Leo Harlem, uno de los humoristas más carismáticos y reconocidos de España. Tal y como ha contado en varias ocasiones, empezó a trabajar en la panadería de su padre a los 16. Años más tarde, concretamente a los 40, su talento por los chistes le dio la oportunidad de incorporarse a 'El club de la comedia'.

Hombre de muchas palabras, pero muy celoso de su vida personal, aquí traemos algunas curiosidades para conocer al verdadero Leo Harlem, el humorista que es capaz de contar un monólogo en el menor tiempo posible.

Su orgullo por ser de pueblo

Leo Harlem nació en Matarrosa del Sil, en León, un pueblo que tiene poco menos de ochocientos habitantes. Siete años después, él y su familia se mudaron a Valladolid, donde empezó a trabajar en la empresa de su padre. Cuando le salió la oferta de participar en 'El club de la comedia', se trasladó a Madrid y lleva viviendo en la capital desde entonces.

Sin embargo, él se siente muy orgulloso de sus orígenes rurales. En una entrevista para la revista 'Escapada Rural' en 2020, el cómico confesaba que no visitaba mucho Matarrosa del Sil. Aun así, decía que "soy de pueblo y lo llevo a gala. La ciudad no está mal, pero la vida como debe ser es en los pueblos".

Su experiencia en la universidad

Cuando era joven, decidió estudiar Arquitectura, pero abandonó la carrera para probar suerte con Derecho, estudios que también dejó. Después, regresó al negocio de los panes y continuó hasta los 28 años, cuando se adentró en el sector de la hostelería como camarero.

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Es en esta etapa donde se inspiró para crear su nombre artístico, Leo Harlem, ya que realmente se llama Leonardo González Feliz. Estuvo trabajando en un local de Valladolid llamado El Harlem, un bar donde "se ponía música de jazz, soul... y se me quedó el nombre como si fuera de mi propio apellido", confesó en una entrevista para 'Diez Minutos'.

Uno de los idiomas que conoce

Aunque él sea de Valladolid, Leo Harlem sabe catalán, algo que confesó en una de sus visitas a 'El hormiguero'. En el programa, el leonés hizo un monólogo imitando a un comentarista deportivo. Después de ello, dijo que las nociones que sabía del idioma venían de las veces que veía partidos de fútbol en catalán.

"Sé mucho en general de fútbol, aunque me he desconectado últimamente, pero en esa época era muy futbolero. Entonces había vídeos de partidos del Barça que solo venían en catalán. Y yo, a base de verlos, aprendí catalán", señalaba.

Dónde le gustaría jubilarse

Aunque actualmente viva en Madrid, a Leo Harlem no le gustaría disfrutar de su jubilación en la capital. En la misma entrevista concedida a la revista 'Escapada Rural', el humorista confesó que su lugar ideal sería Gijón o "como pueblo, quizá uno que estuviese en la montaña".

Desde que se incorporó a 'El club de la comedia' vive en la capital, aunque él piensa que las ventajas que tiene un pueblo frente a una ciudad es "sobre todo, el ritmo de vida. Es más acorde con lo natural y los tiempos para hacer algo son más racionales. En las ciudades pierdes mucho tiempo desplazándote", señalaba en la revista 'Escapada Rural'.

Su discreta vida personal

Una de las cosas que hay que destacar de Leo Harlem es la dificultad de que hable sobre su vida personal. En ese sentido, el leonés siempre ha sido muy hermético y es complicado que detalle cosas sobre su intimidad.

Lo único que se conoce es que tiene pareja, Nuria, y lleva saliendo con ella desde hace 30 años. No están casados y tampoco tienen hijos. Se conocieron en su etapa universitaria, pero no se le ha visto con ella en público.

Uno de sus hobbies es la cocina

Además de la comedia, Leo Harlem ha demostrado en alguna ocasión sus dotes para la cocina. Una de ellas fue en la campaña 'Recetas solidarias' que se realizó en Valladolid, donde preparó lechazo, un plato tradicional de su tierra.

El mundo de la cocina ha sido muy habitual en sus monólogos, y ha llegado a confesar cuál es el ingrediente que no debe faltar nunca en sus elaboraciones, que es "el aceite de oliva", confesaba en una entrevista para 'El País'.