El rey Juan Carlos no va al funeral de su amigo Tchokotoua (pero Marta Gayá sí)

Zourab Tchokotoua murió hace dos semanas en Rabat, donde vivía con su mujer. Tenía 81 años y había sido uno de los mejores amigos de don Juan Carlos. Compartieron vida social cuando eran jóvenes y más tarde en Mallorca, donde el autoproclamado príncipe georgiano se instaló y se casó con Marieta Salas, una de las grandes fortunas de la isla, de la que se divorciaría.

Según han confirmado a Vanitatis, la fraternidad con el monarca no era tan intensa en la última década y dejaron de tratarse. A doña Sofía nunca le cayó bien. Cuenta la leyenda que fue él quien presentó a Marta Gayá a don Juan Carlos. Hay otra versión que da la autoría al escritor José Luis de Vilallonga, a quién don Juan Carlos encargó su biografía. Ya fuera uno u otro, el caso fue que la Reina nunca le tuvo aprecio.

Este lunes se celebró en la iglesia de Gstaad, la localidad suiza en la que pasaba temporadas Tchokotoua, un funeral al que no acudió el Rey emérito, que ha puesto rumbo a Finlandia, donde participará en el Campeonato del Mundo de la clase 6M en la villa marinera de Hanko. Quienes sí se trasladaron hasta Gstaad fueron el hijo Igor Nicolás, cuyo padrino de bautismo fue Gunter Sachs, que dejó parte de su herencia al príncipe fallecido, varios sobrinos y Marta Gayá, la amiga incondicional del hoy Rey jubilado.

La mallorquina pasa parte del año en la elitista estación de esquí, donde tiene una casa, y el resto visitando a sus amistades de medio mundo. Hace tiempo que su cuartel general dejó de ser el precioso apartamento que tiene frente a la bahía de Palma y que puso a la venta para después cambiar de opinión. Por el momento, sigue siendo de su propiedad.

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Su relación con Tchokotoua se mantuvo a lo largo de los años y compartieron vida social y amigos tanto en Mallorca como en Suiza y de ahí que quisiera estar presente en la misa funeral. No hubo encuentro con don Juan Carlos. Aseguran a Vanitatis los que conocen la trayectoria del príncipe y el monarca español que no tenía mucho sentido el viaje de don Juan Carlos, que no suele acudir a funerales salvo que sea estrictamente necesario.