Sorpresa: Irene Urdangarin se va de año sabático y la infanta Cristina se queda sola en Ginebra

Después de meses de esfuerzo, de estudios intensos y hasta de prácticas no remuneradas en un hotel conseguidas a última hora, Irene Urdangarin decidió cambiar de planes este verano. La única hija de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina tenía que estudiar hostelería, estaba matriculada y había pasado todas las pruebas de acceso, incluidas las citadas prácticas, que tuvo que improvisar porque no tenía constancia de ese requisito.

Pero finalmente ha decidido darle un vuelco total a su vida y volará lejos y a su aire. Irene Urdangarin pasará este año lectivo como cooperante, según informa la revista ‘¡Hola!’ este miércoles. Así pues, la infanta Cristina se queda sola en Ginebra.

La sobrina del rey Felipe VI ha heredado de su familia esa voluntad religiosa de ayuda al prójimo, y siguiendo los pasos de su madre, de su padre y de su hermano mayor, Juan, viajará este año sabático para realizar labores humanitarias. Según la misma información, la joven maneja varios destinos: India, Mozambique y Camboya.

Destinos de su madre

Y todos son viejos conocidos de la familia. India y Mozambique son precisamente dos de los puntos a los que viaja su madre continuamente por trabajo. Tanto por sus labores al frente del Área Internacional de la Fundación Bancaria La Caixa como en la Fundacion Aga Khan. Ambas entidades tienen varios proyectos de cooperación y desarrollo en estos países, dirigidos todos por la infanta Cristina.

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Camboya, por otro lado, fue a donde viajó su hermano Juan Urdangarin en su año sabático, ese ‘gap year’ -que se llama en inglés- que tanto se estila en otros países de Europa y de América, en especial en Estados Unidos.

Larga estancia en Barcelona

Este es uno de los motivos por los que la joven alargó tanto su estancia en Barcelona: se la ha podido ver hasta hace pocos días en la capital catalana, en los alrededores de la casa de su hermano, el nuevo apartamento que tiene en Pedralbes, y también en la casa de su amiga y ‘cuñada’, Johanna Zott. La novia de Pablo es la anfitriona de los Urdangarin cuando vienen a Barcelona, en especial de Irene, con quien mantiene una gran amistad y ha llegado incluso a compartir cama como ‘best friends forever’.

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Además, Irene aprovecha sus estancias en Barcelona para estar con sus primos Urdangarin. Los hijos de Ana Urdangarin están muy unidos a sus primos Urdangarin de Borbón porque han compartido muchas vivencias, ya que ambas familias residieron en Barcelona durante muchos años. Ahora, no obstante, ni Iñaki ni Ana viven ya en la capital catalana.

Irene mantiene una estrecha relación con sus primos. Cabe recordar que Carlota, una de las mayores Gui, es ya madre y el pequeño es el ‘juguete’ de todos los Urdangarin. También lo es para Irene, que incluso guarda fotografías del bebé en sus lugares más especiales, según informan fuentes de la familia.

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La carrera que había escogido Irene era el Bachelor in International Hospitality Management, que dura tres años, a los que hay que sumar el curso preparatorio. Así que en 2027 podría haber terminado sus estudios, algo que ya sabemos que no va a suceder. El cambio ha sido drástico y sorprende por los esfuerzos que había puesto la joven en lograr el acceso a la mejor escuela de hostelería del mundo.

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Un acceso que había llenado de orgullo a su familia, porque cuando sus padres se separaron a raíz del escándalo de las fotografías de Urdangarin con otra mujer, el expediente de su hija se vio afectado. Irene pasó de ser una estudiante responsable a perder el interés en los estudios y sus notas empezaron a bajar. Según fuentes cercanas, su madre se mostró muy preocupada con su entorno directo porque temía que su hija llegara incluso a repetir curso. Por ese motivo, comentó a los suyos que quería permanecer en Ginebra hasta que su hija lograra graduarse en bachillerato y después la carrera. Ahora, con el nido vacío, veremos cuál es el futuro de doña Cristina.