Es posible lucir un vientre plano a partir de los 40, solo tienes que hacer estos ejercicios

El paso del tiempo nos cambia en todos los sentidos, tenemos más experiencia, somos más sabias -o, por lo menos, esperamos serlo- y más maduras. Pero nuestra forma de ser no es lo único que cambia, nuestro cuerpo tampoco es el mismo.

Pasados los 40, ya no reacciona de la misma manera y tendemos a acumular grasa en la zona abdominal, cuando nunca antes nos había sucedido. Hay muchos factores que influyen en esto, uno evidentemente es la edad, pero otros son los hábitos que adoptamos con los años.

Conforme cumplimos años, tendemos a hacernos más sedentarias, un problema que cada vez afecta a una parte más grande de la población y al que conviene poner remedio. Los malos hábitos alimenticios también influyen, así como el estrés o los cambios hormonales.

Esto no quiere decir que debamos resignarnos y dejarlo correr, nunca es tarde para tomar las riendas y comenzar a llevar una vida lo más saludable posible, y si en el camino conseguimos ese vientre plano que queremos, mucho mejor.

La alimentación juega un papel fundamental a la hora de reducir la grasa corporal porque no existe ningún ejercicio que consiga eliminar la grasa de un lugar concreto, pero lo que sí podemos hacer es tonificar la zona para que cuando la grasa disminuya podamos observar los resultados.

Ejercicios para un vientre plano

Lo mejor es dedicar la mayor parte de los ejercicios que hagamos a trabajar la zona del core, lo que nos aportará una mayor estabilidad. Uno de los ejercicios más eficaces para conseguirlo y que no puede faltar en tu rutina es la plancha.

Colócate boca abajo apoyada sobre las palmas de las manos y las puntas de los pies. Mantén los brazos estirados, el cuerpo recto y el abdomen apretado. Aguanta en esa posición unos 30 segundos. Descansa un poco y repite otras dos veces.

¿Conoces el bird dog? Solo tienes que ponerte a cuatro patas, con las rodillas apoyadas en el suelo y la espalda en una posición neutra. Ahora estira el brazo derecho y la pierna izquierda, mientras mantienes el equilibrio y activas el core. Mantén la postura unos segundos, vuelve a la posición inicial y repite pero con la pierna y brazos contrarios.

Un ejercicio que resulta muy efectivo es el puente, para el que tendrás que tumbarte boca arriba con las rodillas flexionadas y los pies apoyados en el suelo. Eleva la cadera hasta formar una línea con tu cuerpo. Aguanta en la posición unos 15 segundos, relaja y repite tres veces más.

Tratándose de la zona abdominal, no dejes de incluir en tu rutina deportiva unos crunches. Tumbada boca arriba, flexiona las piernas y apoya las plantas de los pies en el suelo. Coloca las manos en la nuca y flexiona el tronco elevando la cabeza y los hombros. Haz 15 repeticiones, descansa unos segundos y repite dos veces más.

Para evitar perder masa muscular conviene hacer ejercicios de fuerza y resistencia, esto hará que se acelere nuestro metabolismo, que tiende a ralentizarse conforme cumplimos años. ¡No tengas miedo de incluir las pesas en tus entrenamientos!