Tana Rivera 'resucitará' a la duquesa de Alba y a Carmina Ordóñez en su vuelta a la vida pública

El domingo 1 de mayo, Cayetana Rivera Martínez de Irujo inaugurará oficialmente el primer día de la Feria de Sevilla, siendo la madrina de la Exhibición de Enganches que se celebra en la Real Maestranza. A sus 22 años, la nieta de la duquesa de Alba debuta públicamente en un acto al que tantas veces acudió su abuela y lucirá la mantilla blanca. Conocida familiarmente como Tana, contará con el apoyo de sus padres, Eugenia Martínez de Irujo, duquesa de Montoro, y Francisco Rivera. También estará su novio, el empresario sevillano Manuel Vega, y su tío Cayetano Martínez de Irujo, que además participará en el concurso con dos coches.

Cayetana sigue los pasos de Victoria Federica de Marichalar, que debutó en un acto público en este mismo evento en el año 2019. Ella hasta ahora ha llevado una vida más discreta, a pesar de su popularidad desde que nació. Las dos jóvenes comparten su pasión por el mundo taurino y Andalucía. Precisamente esta misma semana Vic, como llaman sus amigos a la hija de la Infanta Elena, acudía a la plaza de toros para asistir a la corrida de Santiago Domecq, en la que toreaban José Garrido, Joaquín Galdós y Alfonso Cadaval, este último cortó una oreja y también Garrido.

Cayetana disfrutará de este día emocionada y nerviosa porque comenta: “Sevilla y la Real Maestranza son muy importantes para mi familia y sé que voy a tener a mis abuelas muy presentes en todo momento”. No solo es una gran aficionada taurina y ha disfrutado en la plaza muchas tardes viendo a su padre o a su tío, Cayetano Rivera, sino que también es una gran amante del caballo, monta desde niña y participa de todas las fiestas y tradiciones de Andalucía.

Homenaje a Cayetana y Carmina

Curiosamente, su abuela materna, la duquesa de Alba, amadrinó este evento, que es el de mayor concentración de coches de caballos, hace diez años. Para el acto, Tana ha escogido el color verde esperanza. Llevará un vestido de Enrique Rodríguez Hidalgo en crepé de seda con mangas con volumen. La mantilla, peina y el mantón serán de su abuela materna, los pendientes de coral de su abuela paterna, Carmina Ordóñez; así ambas estarán representadas en un día tan especial.

Durante el acto de exhibición se otorgarán varios premios: Premio Especial Mantilla Española, en el que un jurado valorará la forma de llevar la mantilla, así como la calidad y originalidad de los complementos; Premios Especial Flamenca, con la colaboración de la diseñadora Rocío Olmedo, se entregarán dos premios, a la niña mejor vestida y a la señora mejor vestida; Premio Especial al Mejor Sombrero, tanto de hombre como de mujer se otorgará el Premio Arsenale al mejor sombrero. Al final de la exhibición, todos los carruajes irán desfilando al recinto ferial. Participarán 80 carruajes, algunos con guarnición calesera y otros a la inglesa.

Eugenia, la madre de Cayetana, ha ayudado muy ilusionada a su hija en todos los preparativos. Ella comparte con su hija la pasión por Sevilla, suele acudir todos los fines de semana a su finca sevillana, donde disfruta del contacto con la naturaleza y sus animales. La unión entre la duquesa y su hija es tan estrecha que hasta comparten amigos y fiestas, a las dos les encanta el flamenco y la música, y es habitual verlas en reuniones de amigos, junto al marido de Eugenia, Narcís Rebollo, y el novio de Tana, Manuel Vega.

Durante esta semana, Cayetana vivirá con sus amigos y su familia la Feria de Abril, y también se vestirá de flamenca, este es un rito que a madre e hija también les gusta compartir, suelen hacerlo en el palacio de Dueñas. Además sus respectivas parejas han congeniado muy bien y comparten muchas cosas juntos.

Tana Rivera nació en Sevilla el 16 de octubre de 1999, siendo la primera nieta sevillana de la duquesa de Alba, es la única hija del matrimonio de Eugenia Martínez de Irujo y Francisco Rivera Ordóñez. Pasó los primeros años de su vida en Sevilla, pero tras la separación de sus padres en el año 2002, se trasladó a vivir con su madre a Madrid. Aunque antes de llegar a la mayoría de edad Francisco intentó que su hija regresara a Sevilla junto a él e intentó obtener su custodia legalmente y eso provocó un desencuentro con Eugenia, con el tiempo la situación se normalizó.

En la actualidad, la relación entre los padres de Cayetana es muy cordial y como comenta Eugenia: “Soy cero rencorosa, y para mí lo importante siempre es mi hija, hay que llevarse bien con todo el mundo, y además Lourdes es una monada”. Cariñosamente, Eugenia llama a su hija “ratón” y de esa manera le dedica a veces mensajes cariñosos en las redes.

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