Carmen Janeiro y el millonario asturiano Luis Masaveu ya no hacen negocios juntos

El Ssifex es un tipo de cemento de fraguado lento producido a base de sulfato cálcico y especialmente resistente sobre todo tipo de soportes. Tal es la fe que Carmen Janeiro tenía en este material, que en 2021 la hermana de Jesulín de Ubrique se metió de lleno en la promoción de este producto creando dos empresas con sede en Sevilla para explotarlo. La única mujer del clan de Ubrique y su socia invirtieron una cantidad millonaria en estas compañías. Pero, ¿qué pintaba Carmen Janeiro invirtiendo en mortero? La respuesta la tenía su relación con Luis Masaveu, un empresario asturiano con el que ha tenido un noviazgo de idas y venidas desde 2011.

Carmen se asoció con una empresaria del sector para distribuir en España este material. Ambas fundaron ese verano de 2021 dos empresas con sede en Dos Hermanas, Persolvo SL y Ssifex Europa SL, que se dedican a la fabricación de hormigón y "de todos los productos y sistemas que contengan o deriven de los productos denominados Ssifex-Home y Ssifex-Eco", según se publicó entonces el Boletín Oficial del Registro Mercantil.

El capital inicial de Ssifex Europa superaba los 785.000 euros, y el de Persolvo se acercaba a los 80.000. En noviembre de 2022, la hermana de Jesulín redobló su apuesta por este material de alta seguridad y amplió el capital de Ssifex Europa inyectándole 612.000 euros más. En total, la compañía (sin empleados) gozaba de un capital suscrito de cerca de 1.400.000 euros. Parecía que la cosa iba en serio... hasta ahora. Janeiro acaba de solicitar la disolución de la sociedad. Puestos en contacto con su entorno, han preferido no entrar en las razones que le han llevado a hacerlo.

A la vuelta de Semana Santa y a petición de Janeiro, las socias se reunirán para hacer balance de los ejercicios en los que la empresa no ha logrado sus objetivos. Se estudiarán las causas de disolución "por cese en el ejercicio de actividad que constituye el objeto social con imposibilidad manifiesta de conseguir el fin social, causación de pérdidas con reducción del patrimonio neto a una cantidad inferior a la mitad del capital social", según publica la hermana de Jesulín de Ubrique en el BOE. Presumiblemente, habrá pérdidas.

La relación de Luis Masaveu con este negocio era evidente. Carmen Janeiro hizo carrera en la televisión hasta que en el año 2011 sufrió un accidente doméstico que la llevó a pasar meses en rehabilitación. Paralelamente, comenzó una relación con este empresario, miembro de la mayor fortuna familiar de Asturias gracias a sus negocios precisamente en el sector de los materiales de construcción.

La familia de Luis Masaveu posee empresas cementeras de hormigón desde hace varias generaciones. "La producción de cemento y otros materiales de construcción constituye la piedra angular y primigenia de la sociedad. La mejora permanente de los procesos productivos y el empleo de las más novedosas tecnologías disponibles en el campo de los cementos artificiales y sus derivados permiten a la filial industrial alcanzar una posición de liderazgo en el noroeste de España y consolidar la actividad a nivel internacional", se lee en la web de la Corporación Masaveu.

Los Masaveu han conseguido mantenerse alejados de las crónicas sociales durante décadas. Siempre han evitado que su apellido apareciera en prensa que no fuera económica. El hermetismo de los miembros de la familia con la prensa del corazón ha sido siempre absoluto. Ni siquiera las bodas familiares, bautizos o comuniones han tenido repercusión. De ahí que, salvo aquellos que siguen la información económica, la gran mayoría de españoles apenas hubieran oído hablar de los Masaveu hasta que llegó Carmen Janeiro a la vida del benjamín del clan.

Por su parte, Carmen Janeiro, a la que el gracejo popular bautizó como 'la Jesulina', pertenece a una familia muy conocida que durante años ha protagonizado las crónicas del papel cuché. En lo personal, más allá de las polémicas, Carmen siempre ha sido uno de los pilares en la sombra del clan de Ubrique, intentando aplacar conflictos y reconducir posturas. Hasta su excuñada, la mismísima Belén Esteban, le brindó un reconocimiento público por no haber soltado la mano de su hija Andrea nunca: "Gracias por ser la única de la familia que te preocupas, te estaré siempre agradecida. Eres la única, gracias por portarte como lo haces”, dijo públicamente.

A pesar de la naturalidad con la que ha hablado siempre de su vida, Carmen Janeiro se ha mostrado hermética en lo referente a su relación con Luis Masaveu y no ha vuelto a la televisión. En 2014 montó un centro de manicura, y cuenta con otras sociedades que no están actualmente activas, salvo las dos citadas. Su entrada en el mundo del hormigón con un capital tan relevante sorprendió, igual que fue chocante para la opinión pública su relación con Masaveu. Al parecer, les presentaron amigos comunes y lo que en un principio no parecía nada serio se convirtió en una historia de amor con algunas sonadas rupturas, como la que protagonizaron en 2021.

Janeiro mantiene buena relación con la familia de su pareja. Elías Masaveu, el padre, fue una figura clave de la burguesía financiera asturiana y un hombre profundamente familiar. Falleció a los 74 años en Los Ángeles. Hoy es uno de los hermanos, Fernando Masaveu Herrero, quien lidera el negocio familiar. El clan ostenta el puesto número 18 entre las mayores fortunas españolas según la lista que cada año publica el diario El Mundo, con un patrimonio valorado en 2.690 millones de euros. Luis se mudó a Portugal después de conocerse su relación con Carmen Janeiro, por las ventajas fiscales y, probablemente, para evitar la presión de los paparazzi.