Letizia, friolera en Andorra: el gesto de la Reina para enfrentarse a las bajas temperaturas

Cuando este jueves vimos llegar a doña Letizia a cuerpo descubierto, únicamente con el vestido burdeos de Massimo Dutti, a Andorra, muchos nos preguntamos si no estaba pasando frío. Los termómetros marcaban 8 grados, pero ella parecía estar la mar de cómoda. Ya nos ha demostrado en tiempos pasados que no tiene muchos problemas con la temperatura, y que puede llevar incluso manga corta en invierno. Sin embargo, en este segundo día de su visita al país vecino, la Reina ha tenido que echar mano de un complemento para enfrentarse al clima pirenaico.

Este viernes, en sus últimas horas en Andorra, los Reyes han realizado una visita al colegio español María Moliner, donde doña Letizia se ha mostrado de lo más cariñosa con los más pequeños, y a la iglesia de Santa Coloma. Posteriormente, se desplazarán hasta Ordino, una parroquia situada en el extremo noroeste del Principado de Andorra, conocida por sus pistas de esquí. Allí disfrutarán de un almuerzo ofrecido por el jefe del Gobierno andorrano en el restaurante Era Rossell. El viaje de Estado terminará con la visita al Museo Casa d'Areny-Plandolit.

A su primer acto, la Reina ha llegado bastante primaveral, con zapato abierto y escote descubierto. Sin embargo, al pasar las horas se ha visto obligada a taparse el cuello con un pañuelo negro que había cogido, consciente de que quizás pasaba frío. Y es que ese top lencero con encaje no parece lo suficientemente cubierto como para protegerla de las bajas temperaturas. Suerte que llevaba encima la chaqueta, una chaqueta de cuadros Príncipe de Gales, con doble abotonadura y dos bolsillos de solapa. Un diseño de CH Carolina Herrera cuyo precio original era de 690 euros. La estrenó en febrero en unas audiencias.

La Reina ha combinado la chaqueta y el top con unos pantalones tobilleros negros, un modelo sencillo, y unas bailarinas planas -ideales para el tipo de terreno que pisaba- de Hugo Boss en charol negro, punta fina y una tira diagonal. Asimismo, le ha añadido a la blazer un cinturón ancho de la firma Mohel. El look lo redondeaba una cartera de mano tipo sobre de Uterqüe que tiene desde hace años, aunque hacía muchísimo que no se la veíamos. Durante 2012 y 2013 fue su clutch preferido, y lo tiene en distintos colores, como plateado y rojo.

En cuanto a joyas, ha seguido la línea minimalista del día anterior optando por los pendientes Doble Daga de la firma española Gold & Roses, un diseño realizado en oro blanco y diamantes cuyo precio es de 1.800 euros. No faltaba el anillo de Karen Hallam. Con este look, la Reina pondrá fin a su visita de Estado a Andorra, que está siendo breve pero intensa y, sobre todo, marcada por la pandemia del coronavirus.