Iluminadores líquidos, en polvo, en crema… ¿Cuál es el indicado para sacarte el máximo partido?


Sin duda, el 'highlighter' se ha convertido en un elemento básico del neceser de cualquier usuario gracias a su inmenso potencial para elevar un maquillaje aportado diferentes efectos que, en definitiva, se alían con la luz.

Verónica Pose, National Makeup Artist de Sephora, nos recuerda como hace unos años la tendencia 'strobing' protagonizó un sinfín de looks en los que, solo con esta fórmula, resaltaba las zonas altas del rostro y que “después se quedó con nosotros como complemento del contouring, dando más atención a las mejillas”. La experta recuerda que entre los trends más recientes, debemos nombrar el 'glow skin' que el año pasado comenzó a pisar muy fuerte o los maquillajes de piel de porcelana, bautizada como 'glass skin', que la make up artist Pat Mc Grath convirtió en protagonista de la pasarela de Maison Margiela y que augura que dará que hablar en este 2024.

Este sinfín de tendencias ha provocado que la oferta de iluminadores se multiplique con el único objetivo de cubrir las necesidades y anhelos de todos y cada uno de los usuarios que se deciden a utilizarlos.

En diversos formatos, con alternativas texturas e intensidades, en funciónde los acabados precisos que emanen, por su capacidad de fijación… Con tal diversidad no siempre es sencillo dar con la referencia idónea para tu cutis que sea capaz de cumplir con nota todos los requisitos.

Hoy hablamos con maquilladores con dilata experiencia con el fin de descubrir los pros y los contras que debes valorar a la hora de elegir la referencia que reclaman tus looks.

Nota: María Nebrera, maquilladora de las firmas Catrice y Essence, recuerda que debemos tener presente que al margen de los iluminadores para zonas más específicas, hay muchas opciones en el mercado como “sérums, prebases 'glow', contornos de ojos con ingredientes radiante… Es importante saber el efecto que buscamos para poder decidir”.

Factores clave de un iluminador al uso

Cada maestrillo tiene sus principios y Verónica Pose sostiene que, a la hora de decantarte por uno, debes tener presente el acabado deseado (que se note más o menos, con o sin 'shimmer'…), el subtono de la piel para que quede en armonía o si anhelas un tono opuesto con el fin de que sea más evidente (pueden ser matices más neutros, rosas o dorados) y, por último, cómo lo vas a aplicar ya sea con los dedos, con esponja o con brocha.

Xabier Rodrigues, National Artist Iberia de Mac Cosmetics insiste en que es importante fijarte en qué tipo de tez tienes para alcanzar el acabado ideal. Así, aunque los iluminadores están formulados para funcionar en todos, su consejo general es que en una grasa utilices un 'highlighter' más liviano en polvo, con el fin de que “aporte solo luminosidad". Para cutis secos es preferible decantarte por productos cremosos o líquidos, ya que “normalmente se busca un efecto más jugoso e hidratado y estas texturas ayudan a crear una piel de lo más apetecible”.

¿Sobre los cutis con mucha textura o líneas de expresión marcadas? Con el objetivo de que pasen desapercibidas, obvia el uso del iluminador puesto que “provoca que la luz incida más en las zonas donde lo aplicas y los microvolúmenes cutáneos se acentúan”, sostiene Xabi Rodrigues que aconseja seleccionar referencias con partículas microscópicas, casi invisibles, que aporten un acabado radiante sin sobredimensionar.

El tono perfecto

“Si buscas un aliado básico, los achampanados son los más versátiles, ya que favorecen a todos los fototipos y combinan perfectamente con cualquier look”, apuntan desde Mac. Los definen como un fondo de armario que nunca falla. Aunque la ley universal mantiene seleccionar fórmulas del mismo subtono que la tez, Verónica Pose especifica que “para una piel más fría será ideal un matiz rosa y, en las que tienen un subtono cálido, mejor uno más dorado”.

Eso no implica que puedes lanzarte a probar productos más llamativos, con fondos azulados, morados… que te ayuden a lucir un aspecto diferente y divertido.

Trucos para optimizar tu highlighter

Si bien es cierto que la experiencia es un grado y que el consejo es que te dejes llevar para probar y sacar el máximo partido a tus referencias que encapsulan un look radiante, hay ciertos tips profesionales que te pueden ayudar en la tarea…

• La cantidad justa. Aplica poco iluminador para un efecto natural, y, a medida que quieras algo más intenso, añade producto.
• Zonas clave. Xabi Rodrigues recuerda que la teoría es utilizarlo en las partes altas del pómulo, el tabique nasal, la punta de la nariz, el arco superior del labio o la barbilla. Aunque muchos de ellos pueden actuar también como sombra de ojos o en el lagrimal.

• Efecto anhelado. María Nebrera, recomienda que te preguntes cuál es el acabado que buscas a la hora de decidir cuál escoger. Es importante, antes de ejecutar la compra, ¡pruébalo!
• Intensidad modulable. Para una luminosidad natural, bonita y sutil, “aplica el highlighter antes de la base”, reconoce Verónica Pose. ¿Su consejo para un matiz deslumbrante? Úsalo como último paso del look, con la brocha humedecida con spray fijador, y así ganarás intensidad.

Conoce al detalle las tres texturas más comunes…

En formato líquido

No marcan tanto las líneas de expresión, se difuminan con facilidad y son aptos para todos los cutis. Los secos los adoran, pero e incluso los oleosos deberían perderle miedo, ya que se centra en añadir solo luz. Además, se pueden aplicar como quieras (brocha o dedos), usarlo de forma localizada o mezclarlo con tu crema o base de maquillaje para presumir de un matiz 'glow' general.

El inconveniente es que si no estás muy experimentada, pueden ser más complicados de utilizar porque “se expanden más y pueden llegar a zonas que no queremos resaltar”, recuerdan desde las firmas Essence y Catrice.

En crema

Destacan por su resultado natural, su capacidad para adaptarse bien a la piel (con los dedos es más fácil, ya que te permiten calentar el producto) y ser adecuados en cualquier cutis (el tip es usarlo con cautela en zonas grasas para controlar potenciales excesos).

Un modo de optimizarlo es convertirlo en una prebase (después de la crema pero antes del fondo de maquillaje), sobre todo en las partes altas del rostro para que genere un halo radiante.

En polvo

Tradicionalmente, son los más populares por su alta concentración de pigmentos y porque muchos de ellos se pueden aplicar en los párpados, siempre con brocha. Aunque ya sabes que si tienes arrugas o líneas de expresión muy marcadas, es mejor evitarlos… Recuerda que la clave es difuminarlos correctamente con un pincel suave y gestos ascendentes (prueba a fijar base previamente con polvos traslúcidos).

¿Cuál dirías que es el tuyo?