La marca de Virginia Pozo, socia de Inés Domecq, lanza vestidos low cost para novias y madres de comunión

Cada vez son más las firmas de invitadas que se suman a la moda nupcial. Especialistas en vestir con sus diseños a las mujeres más estilosas de boda en boda, han visto en el armario de la novia un filón para aumentar sus ventas. Un filón para estas marcas y también para las futuras 'bride to be', que, gracias a sus colecciones, pueden hacerse con un traje blanco e impoluto a precio asequible.

No es la primera ocasión, pero sí que es la novedad en su catálogo: la colección 'I Do' de Coosy ya está a la venta. Precedida por la buena acogida que estos modelos tuvieron la pasada temporada, una de las firmas españolas preferidas de las invitadas vuelve a la carga y nos deleita con 7 looks perfectos para novias y también para madres de comunión o bautizo.

Capitaneada por Virginia Pozo, fundadora de Coosy y socia de Inés Domecq en el universo IQ Collection, desde su creación en 2011, la marca ha vestido y viste a cientos de mujeres para eventos año tras año. Con las máximas de estilizar a la mujer a base de patrones favorecedores y los diseños femeninos, Coosy se ha ganado un hueco en los vestidores más exigentes. Otra de sus armas infalibles son los precios; son vestidos y looks para invitadas accesibles.

Replicando esos avales, regresa a su catálogo la colección 'I Do'. La marca lo deja claro: "Son atuendos pensados para novias y mamás de bautizos y comuniones". Novias de bodas civiles y madres ilusionadas, es el momento de que descubráis los vestidos que se esconden en esta línea.

Todos son blancos, ese es el nexo común de los trajes, y algunos cuentan con detalles negros a contraste, la tendencia que manda sobre las pasarelas y que promete recuperar protagonismo en las bodas a lo largo de 2024. ¿Sus precios? Rondan entre los 100 y los 200 euros.

Algunos, como el vestido Cons y Dominica, o el conjunto 50S, respiran un aire retro de arriba a abajo. Lazadas, faldas evasé con vuelo y largo midi, y cortes en la cintura. Los tocados que adornan las cabezas de las modelos, tipo casquete y en el mismo tono, suman para crear esa imagen vintage nupcial.

Para las novias o invitadas que buscan ese algo más y diferente, los vestidos Carmencita y Dinastía. El primero, confeccionado en tweed de color blanco, cuenta con el cuello subido, manga corta abullonada, corte en la cintura, falda estilo lápiz con abertura trasera y cierre con cremallera invisible. ¿Lo más especial? Las tres camelias en color negro que decoran la parte frontal.

El segundo, fabricado con el mismo material rústico, tiene el cuello redondo, manga larga abullonada, corte en la cintura, falda midi terminada en volante e incluye un maxicuello adaptable con lazo de terciopelo negro, que también se puede colocar como fajín.