Abraham Menéndez: "Gijón es una ciudad donde la gente disfruta de su propio tempo"

Se autodefine como un mono que hace cerámica, escribe y pinta dibujitos para Dior, Chanel, Sony, Shiseido, Perrier o Massimo Dutti. Porque Abe The Ape, cuya traducción es algo así como Abraham el Simio, es el alter ego de Abraham Menéndez (Gijón, 1977). Estamos ante un dibujante nada convencional que no encuentra límites en su trabajo ni en el material con el que expresarlo y que, además, ha enamorado con sus platos de cerámica decorados —made in Talavera de la Reina— a varios mitos de la historia del cine; de Isabella Rossellini o Angela Lansbury, entre otras. Y esta misma semana, a buen seguro, seducirá a Meryl Streep en Oviedo.

El asturiano asegura que él solo pretende crear piezas sin pretensiones: bonitas, coloridas, un tanto naíf y cargadas de sentido del humor. “Mis obras huyen de mensajes tipo 'hoy va a ser un gran día' o 'eres mi media naranja'. Mis propuestas son mucho más sutiles. Me gusta especialmente la dualidad entre lo infantil y lo adulto”.

Un estilo con un toque vintage que también ha representado en uno de sus últimos encargos: unos vinilos de los galardonados con los Princesa de Asturias 2023, así como de la familia real, que decoran los ventanales de la firma de abogados Ontier en Oviedo, con vistas al parque de San Francisco, lugar por el que desfilarán desde Murakami a Meryl Streep este viernes 20 de octubre camino al teatro Campoamor, donde se celebran los premios. Todo un honor y un reconocimiento para Abraham Menéndez, que sí es profeta en su tierra.

Tu primer recuerdo de Gijón

“De pequeño, me llamaban el terror de la calle Corrida, la principal comercial de Gijón. Mi madre me llevaba con arnés porque si me soltaba echaba a correr por todas las tiendas tirándolo todo y a ella le tocaba ir detrás pidiendo perdón. De hecho, una de sus mejores amigas, Rosa, era la dependienta de una zapatería de esa calle. Se hicieron inseparables por eso, por tirar yo todos los zapatos de la tienda más de una vez”.

Cómo sois los de Gijón

“Como somos del norte, un poco fríos sí que somos. En la serie 'Patria', veo un poco representada a mi familia. No somos muy afectuosos en público, pero sí somos sanos, nos encanta el humor negro y ácidos. Y nos encanta decir tacos. Somos muy mal hablados, pero a la vez, campechanos, afables y, sobre todo, buenos anfitriones y generosos para el comer y el beber, incluso demasiado”.

Una visita obligada

“Mi lugar favorito es el Museo Evaristo Valle (Camino de Cabueñes, 261), un espacio dedicado a ese pintor asturiano con unas obras de Carnaval que me encantan y una colección de conchas marinas maravillosas. Además, el museo está emplazado en un palacete con unos jardines maravillosos. Merece mucho la pena tanto el continente como el contenido. No me importa si suena políticamente incorrecto, pero me encanta la arquitectura fascista".

En Gijón tenemos el edificio más grande de España, la Universidad Laboral (Luis Moya Blanco, 261, Cabueñes), que tiene el contexto que tiene, pero sus murales son impresionantes. Arquitectónicamente, es un edificio que me gusta mucho, es más que imponente, diría que da miedo. Recomiendo también el barrio de Cimadevilla en la parte antigua. Es el barrio pesquero, con casas muy coloridas. Es una maravilla tomar una sidra y un buen 'pescao' mientras se pone el sol en la Cuesta del Cholo, justo en frente del mar”.

Dónde alojarse

“En Gijón hay muchos edificios art déco muy bonitos. Uno de los pocos de los años 30, obra de Manuel y Juan del Busto, que se ha conservado tal cual con el paso del tiempo y en el que todos los elementos son originales, alberga el hotel El Moderne (Marqués de San Esteban, 27). Es un hotel boutique precioso y si duermes en alguna de las habitaciones superiores con terraza estarás rodeado de figuras art déco. Sus torreones te transportan a 'Metrópolis', de Fritz Lang, o al vídeo 'Express Yourself' de Madonna".

"Gijón es la ciudad con más bares, restaurantes y locales de hostelería de Europa"

Llévanos de aperitivo

“Gijón es la ciudad con más bares, restaurantes y locales de hostelería de Europa. Recomendaría El Golfo Bar (Linares Rivas, 7), especializado en vermús, con una selección muy amplia de marcas y aperitivos, tienen gastronomía tradicional y confían mucho en pequeños productores”.

Dónde comer y qué pedir

“Hay un sitio muy mítico llamado Mesón Sancho (Begoña, 18) con una parrilla tan pequeña que se te hace imposible que todo lo que cocinan lo saquen de ahí y en el que las mollejas y el besugo a la espalda están que te mueres. Han abierto otro local más grande, pero el plan con encanto está en el original. Otro lugar que me encanta es Auga (Claudio Alvargonzález, s/n), con una estrella Michelin, y en el que preparan un pescado y marisco que es para volverte loco, especialmente los carabineros y el salmonete con alioli, y unos oricios —erizos de mar— deliciosos”.

Es la hora de las copas

“Hay una coctelería en la playa de San Lorenzo, en un edificio precioso, que se llama Varsovia (Cabrales, 18), donde se sirven unos cócteles espectaculares. De hecho, Borja Cortina, uno de los propietarios, es el Mejor Bartender de España 2015 según la World Class Competition. Sus gin-tonics están de muerte”.

Vamos de compras

“Para quienes, como a mí, les encanten la decoración y las cosas antiguas, recomiendo un par de sitios muy bonitos, y baratos. Uno de ellos es De Seis a Ocho (Joaquín Fernández Acebal, 6), el nombre coincide con el horario de apertura, y tiene cosas muy chulas y locas. El otro es Punto Retro (Profesor Pérez Pimentel, 139), en La Guía, una zona residencial muy bonita. Y para los amantes del vino, El Gallego Vintage (Begoña, 14), con una selección de vinos y licores estupenda”.

No puedes irte de Gijón sin llevarte

“Sin duda, algo dulce. La ciudad cuenta con un nivel de pastelerías y dulces altísimo. Recomiendo las princesitas, hechas de yema de huevo, y los pastelitos de nuez, una especie de bombones, de La Playa (Corrida, 61), una confitería con más de cien años”.

Tu rincón secreto, ese en el que te gusta perderte

“Mi madre vive muy cerca de la playa y del parque de Isabel la Católica, el principal de la ciudad. Cuando voy a visitarla con Manolito, mi perro, cruzo el parque y llego al Rinconín, una playa canina. Me gusta sentarme allí y que el perro disfrute”.

La mejor época del año para ir

“Te diría que el verano, pero cada vez se está poniendo más horrible de gente que descubre las bondades del clima norteño en agosto que, aunque caluroso durante el día, refresca por las noches. Lo bueno de Gijón es que las temperaturas no llegan a ser muy altas en verano ni muy frías en invierno. Y a quienes les guste la naturaleza, en invierno es de un verdor maravilloso”.

Por qué Gijón es la mejor ciudad del mundo

“Lo que hace diferente a Gijón que es muy habitable y paseable, con una muy buena calidad de vida, a lo que hay que sumar que tiene mar y una naturaleza deslumbrante".

"Gijón es una ciudad relajada en la que la gente va a otro tempo, el suyo. Como las distancias no son muy grandes, es una ciudad muy vivible y cómoda”.

Y aquí vive Abe el Mono