Tercer día de boda de Nacho Aragón y Bea Gimeno: al atardecer, vestido de novia lencero y gastronomía mallorquina
Después de sorprender a todo el mundo con una ceremonia religiosa íntima, los novios terminan oficialmente de celebrar su enlace en la finca Son Verí con una gran fiesta
La boda de Nacho Aragón y Bea Gimeno ha sido, sin duda, uno de los eventos más sorprendentes del fin de semana. Ella es una de las influencers más destacadas de España, y él, el hijo pequeño del matrimonio formado por Emilio Aragón y Aruca Fernández-Vega. Esta historia de amor, que empezó hace ahora 10 años, ha culminado en una celebración que ha durado tres días en Mallorca y que ha reunido a familiares y amigos cercanos de lo más conocidos.
Lo que parecía ser un enlace dividido en dos días, 6 y 7 de septiembre, se transformó en una ceremonia más íntima e inesperada desde el jueves, cuando la pareja decidió sellar su amor ante los ojos de Dios en una misa religiosa que no estaba en el calendario de los medios. Y este sábado ha sido el último día de esta boda de ensueño.
La ceremonia estuvo marcada por momentos emotivos y discursos que hicieron brotar más de una lágrima entre los asistentes y los que hablaron. Todo empezaba con la novia caminando entre las filas de sillas de todos aquellos que han querido compartir con ellos este momento. Al llegar al altar —unas esterillas en el suelo con varias sillas donde ya se encontraba Aragón—, la pareja se ha fundido en un sentido y nervioso abrazo que ha coronado la ceremonia.
La novia ha deslumbrado con un vestido de la madrileña Claudia Llagostera, cuya firma se caracteriza por sus creaciones con aire boho y patrones desenfadados. La diseñadora ha sabido plasmar la esencia de Bea en un traje lleno de detalles sutiles que combinan la modernidad y el romanticismo.
Confeccionado en un tejido ligero tipo lencero, las líneas suaves del patrón han aportado movimiento. El escote en V le da un toque romántico y delicado, mientras que los tirantes finos dan un aire moderno y minimalista. Gimeno lo recogió en Madrid pocos días antes de la boda y ha sido guardado bajo llave en Mallorca hasta este momento. El look nupcial estuvo acompañado por joyas de Leandra y un maquillaje natural proporcionado por Nars, lo que consolidó su estilo fresco y sofisticado.
Entre los presentes, destacan un buen número de representantes del universo influencer como Tomás Páramo y María García de Jaime, María Pombo y Pablo Castellano, María Fernández-Rubíes y Manu Losada, o Alejandra Navarro y su novio, Carlos Fuente.
El cierre del enlace, como no podía ser de otra manera, será una fiesta en la que la música y el baile se prolongarán hasta altas horas de la madrugada, como ya les ocurrió este viernes en la preboda. Una velada que, además de suponer el inicio de su vida juntos como marido y mujer, no tendrá nada que envidiar a los otros dos días que la precedieron.
Una boda que pilla por sorpresa
Todo apuntaba que el jueves iba a ser un día tranquilo, sin mayores sorpresas, hasta que pequeños detalles comenzaron a revelar que Gimeno y Aragón se traían algo entre manos. La creadora de contenido compartió en sus redes sociales una imagen de un ramo de paniculata con hojas verdes, una creación de la floristería La Rosaleda en Palma de Mallorca. Lo que parecía un simple post floral era en realidad un preludio de lo que estaba a punto de suceder: la ceremonia religiosa de la pareja.
Fue Vanitatis quien adelantó la noticia tras preguntar a su círculo cercano. Pero el detonante de la noticia fue cuando la diseñadora gallega Helena Mareque, responsable del vestido de novia, subió a sus redes una fotografía en la que se veía a la influencer recogiendo el traje nupcial. “Bea se casa. Bea eligió un maravilloso traje para su boda religiosa”, comentaba Mareque en su publicación.
El diseño reflejaba el estilo sobrio y elegante de Gimeno, quien apostó por una moda lenta y artesanal, tal y como había hecho en anteriores ocasiones, como en su pedida de mano, donde lució un vestido de la misma diseñadora. Sorprendió con un look poco convencional: un conjunto de chaqueta de seda satinada en tono marfil, que destacaba por su impecable corte y botones discretos, y unos pantalones de encaje con detalles florales. La joya del estilismo fue un top de tirantes y de corte crop con encaje en relieve.
La ceremonia religiosa fue un evento pequeño y reservado, en el que solo asistieron familiares muy cercanos y algunos amigos íntimos. Entre los invitados se encontraban nombres conocidos como María García de Jaime, amiga cercana de la influencer, quien no dudó en compartir en sus redes un emotivo mensaje. Sin duda, un momento que marcó el inicio de un fin de semana inolvidable.
Después de la ceremonia religiosa, el viernes 6 de septiembre fue el turno de la preboda, aunque ya no tenía mucho de “pre”. Una fiesta mucho más relajada, en la que familiares y amigos comenzaron a llegar a la isla de Mallorca para unirse a los novios en esta celebración tan especial. La fiesta fue organizada con un toque informal, donde los asistentes pudieron disfrutar de una velada mágica al aire libre en la playa. El lugar elegido fue el restaurante Bananas Playa, situado en la orilla de Son Bauló.
Gimeno optó por un vestido diseñado por Marta Martí, una creación fresca y sofisticada que le daba un aire relajado, pero sin perder su inconfundible estilo. Un traje mini, sin mangas y con detalles de encaje que combinó con un bikini de bajo. El peinado no podía ser más acorde con el entorno, dos trenzas peinadas hacia atrás, que evocaban al estilo de un día playa. Y acudió descalza.
Tras la emotiva petición de mano en abril del año pasado, durante un romántico viaje a Florida, ambos decidieron que el 2024 sería el año en que darían el gran paso. En su momento, la novia compartió en redes sociales su emoción, agradeciendo a Nacho Aragón “todo lo bueno que está por llegar”, mientras mostraba orgullosa el anillo de compromiso que le regaló el benjamín del clan Aragón, una pieza diseñada por la firma Simuero. Y ese momento ya ha llegado.
La boda de Nacho Aragón y Bea Gimeno ha sido, sin duda, uno de los eventos más sorprendentes del fin de semana. Ella es una de las influencers más destacadas de España, y él, el hijo pequeño del matrimonio formado por Emilio Aragón y Aruca Fernández-Vega. Esta historia de amor, que empezó hace ahora 10 años, ha culminado en una celebración que ha durado tres días en Mallorca y que ha reunido a familiares y amigos cercanos de lo más conocidos.