Anthony Delon cumple 57 en un momento vital complicado, sin renunciar al optimismo

La denominada telerrealidad y la prensa del corazón han hecho arraigar en nuestro país la idea de que hay sagas familiares muy desestructuradas, como es el caso de los Jurado-Mohedano o los Pantoja, y nos podrían inducir al error de que se trata de un fenómeno local. Nada más lejos de la realidad. Es muy común que hijos o familiares cercanos de las grandes estrellas acaben pagando los platos rotos de la alargada sombra de sus progenitores o siendo víctimas de una popularidad para la que no estaban preparados. En Estados Unidos causó conmoción la caída a los infiernos de Cameron, el hijo mayor de Michael Douglas, y en Francia fue una tragedia en 2008 la muerte de Guillaume Depardieu, hijo de Gérard Depardieu, tras años atormentado y con problemas de salud que no logró remontar.

La reciente despedida de Jean-Paul Belmondo en el patio de honor de Los Inválidos de París, convertida casi en un funeral de Estado, nos dejó la insólita imagen de un muy detereriorado y, sin embargo, superviviente Alain Delon, del brazo de su hijo Anthony, cuya relación personal ha sido como una montaña rusa. El mítico protagonista de 'El gatopardo', 'La piscina' y 'A pleno sol' sufrió un ictus en junio de 2019, que le dejó severas secuelas. El propio Anthony compartía hoy 30 de septiembre una bonita imagen en Instagram en la que echa la vista atrás y recuerda a su madre, recientemente fallecida a consecuencia de un cáncer. En esa ocasión, sí pudo estar presente en su cumpleaños, no así en el 57 que celebra hoy.

En cuanto a su padre, Alain Delon, como hemos podido comprobar ahora, se encuentra bastante mejor de lo que ciertas alarmistas noticias que llegaban desde Suiza, donde estuvo convaleciente, hacían pensar. No en vano obtuvo la ciudadanía de ese país en marzo de 2000, lo que le granjeó en su momento severas críticas, pero le ha beneficiado enormemente en términos económicos, pues la presión fiscal en Francia es mucho mayor. Volviendo al presente... Ese momento dramático y cómo gestionar su salud supuso, sin embargo, un acercamiento entre sus descendientes, pese a las discrepancias iniciales sobre dónde debía recuperarse si en Francia o en el país centroeuropeo.

Delon es padre de tres hijos (reconocidos, pues desde hace dos décadas el fotógrafo Ari Boulogne, cuya madre era la cantante alemana Nico, sigue intentando sin éxito en los tribunales que se reconozca su filiación). A saber, el ya mencionado Anthony, quien tras un debut fulgurante en el cine con 'Crónica de una muerte anunciada' nunca logró consolidar una carrera como actor, aunque frisando los 50 lo estuvo intentando con más ahínco que en su juventud; Alain-Fabien, que también es actor y ha despuntado sobre todo como modelo, y Anouchcka, la que, según algunos, es su favorita y, por así decirlo, la mano que mecería la cuna. Esta última era la partidaria de que el intérprete de 'Borsalino' y 'Rocco y sus hermanos' se quedase en Suiza tras el ictus y así fue, lo que facilitó que ella estuviera pendiente de él, mientras que sus hermanos, afincados en París, lo tuvieron más complicado para verle.

La relación del astro del cine francés con sus hijos ha atravesado momentos durísimos y llenos de reproches por su parte, pero ellos tampoco se lo han puesto fácil a él. En este contexto debemos subrayar las demoledoras palabras de Alain-Fabien a 'Vanity Fair' en 2014, que en nada tienen que envidiar, si nos ponemos castizos, a las diatribas de Kiko Rivera contra Isabel Pantoja.

Juzguen ustedes: “No me enseñó a amar, de hecho no creo que sea capaz de amar. Quizás he aprendido a querer al saber lo que es no ser querido. Mi padre estaba seguro de que iba a ser un criminal el resto de mi vida e iba a acabar en la cárcel como mi hermano, Anthony. No voy a intentar cambiar su idea, porque incluso antes de que hiciera nada malo, él estaba seguro de que iba a hacerlo”, manifestaba en alusión a un tiroteo en el que se vio envuelto en la casa de su padre en Ginebra, en el que resultó herida de gravedad una joven y por el que fue condenado a cinco meses de prisión, aunque no llegó a entrar en la cárcel. Y también a un episodio de su hermano Anthony, que sí estuvo entre rejas por robar un coche con un amigo y por tenencia de una pistola que dijo haber comprado en un bar de París. En esta ocasión, fue un poema ver al mismísimo Alain Delon ir a recoger a su hijo a la prisión la noche del 22 de febrero de 1983.

Las sucesivas caídas en desgracia del que fuera a los 19 años novio de Estefanía de Mónaco, como también lo sería su amigo Paul Belmondo, no le han impedido reinventarse. Delon es padre de Alyson, con Marie-Hélène Le Borges, bailarina del emblemático cabaret parisino Crazy Horse, una hija que no fue deseada y con la que se reencontraría cuando esta tenía 20 años (acaba de cumplir 35 en septiembre), y de otras dos, Loup y Liv, de 25 y 20 años, respectivamente, fruto de su pasado matrimonio con Sophie Clerico, de quien se separó seis años después de la boda, en 2012, aunque su relación duró 16 años. Ella se marchó a vivr a Estados Unidos y sus hijas prefirieron quedarse a vivir con él. "De todos modos, nunca las habría dejado volar. Y habría tenido razón. Las habría echado de menos demasiado. Mirando hacia atrás, esta situación nos estructuró. Gracias a estar a su lado, me volví mejor como padre y como hombre", manifestaba en 2017.

Crónica de una ruptura anunciada (en las redes)

Ahora Delon está viviendo un momento sentimental delicado, pues acaba de anunciar en sus redes sociales que ha roto con la actriz italiana Sveva Alviti: "Después de más de un mes de separación, es hora de que anuncie la ruptura de mi compromiso con la señorita Alviti y le desee buena suerte en el futuro". Su relación había empezado en 2019 y parecían ir muy en serio.

En septiembre de 2020 aparecían en la portada de 'Paris Match', medio en el que desvelaban que su intención era casarse por la iglesia este 2021. Asimismo, desvelaban que Delon había pedido matrimonio a su pareja durante unas vacaciones en la Costa Amalfitana. "Fue un momento dulce, fuerte y conmovedor", desvelaba entonces la actriz italiana de 37 años (él tiene 57), cuyo papel más señalado hasta la fecha es haberse metido en la piel de la cantante Dalida en un biopic de 2018. Casualidades de la vida, la mítica artista franco-italiana de origen egipcio interpetó una particular versión de 'Parole, parole', que inmortalizó Mina.

Sin embargo, el dolor de la pérdida de su pareja no es equiparable ni de lejos al durísimo golpe que supuso la muerte de su madre, Nathalie Delon, cuyo verdadero nombre era Francine Canovas. Nacida en el protectorado de Marruecos en 1941, alcanzó cierta notoriedad como actriz y modelo, aunque lo que realmente le dio una mayor dimensión pública fue su relación sentimental con Alain Delon, con quien rodó 'El silencio de un hombre', a las órdenes de Jean-Pierre Melville. Su matrimonio apenas duró cinco años y medio, y acabó en divorcio en 1969, pero les uniría para siempre su hijo, Anthony, quien era el encargado de anunciar su muerte en las redes sociales el pasado 21 de enero.

"Mi madre ha muerto esta mañana a las 11 h en París, rodeada de sus seres queridos. Ha muerto de un cáncer rápido. Estoy muy triste. Siempre me duele mucho cuando pierdo a un ser querido". Alain Delon manifestaba también que "Nathalie ha sido la primera mujer de mi vida y la única señora Delon". Su hijo, posteriormente, informaba que había sido despedida en la más estricta intimidad en la iglesia de Saint-Germain-des-Prés, con la llamativa ausencia de su exmarido, que Anthony justificó por la situación sanitaria de la pandemia.

Posteriormente, en el mes de agosto, Anthony pudo cumplir el último deseo de su madre, esparcir sus cenizas en Jamaica. "Mi madre era una leona en el cuerpo de un gorrión. Pequeña, esbelta, dotada de una gran cultura, una inteligencia sutil y también una energía vital, física y mental fuera de lo común. Nadie ha podido interponerse en su camino o decidir por ella". Cuando su madre descubrió que tenía cáncer de páncreas en noviembre de 2019, tuvo una reacción acorde a su manera de ser: "Se volvió hacia mí y me dijo: 'Tengo 78 años, me lo pasé genial y no quiero descomponerme con la quimioterapia, verme morir", manifestaba a 'Paris Match', una de sus publicaciones de cabecera.