¿Protector solar, SPF con color o fotocorrector?

Como seres con consciencia 'beauty' que somos, parece que las dudas sobre por qué debemos cuidarnos del sol están más que superadas. Según el Informe Heliocare 'Buenos hábitos al sol' de 2020, la tendencia es que los jóvenes (el eslabón más reticente en esta misión) cada vez usan más los fotoprotectores con índices altos. Y un dato importante es que no solo los aplican en vacaciones o en momentos puntuales, la cifra de los que los utilizan durante todo el año también crece.

Si prestamos atención a las preferencias a la hora de elegir un protector solar, la encuesta revela que el 75% de las mujeres mayores de 31 años utilizan, al menos, un SPF 50 y para la mitad es un imprescindible durante los doce meses del año. Además de fijarse en el factor, lo que valoran a la hora de adquirirlos es la recomendación de su farmacéutico de confianza y la marca.

Pero lo cierto es que, más allá de esas dudas iniciales, la oferta de referencias para cuidarte del astro rey se ha diversificado muchísimo y han aparecido conceptos adaptados al detalle a nuestras necesidades que, a veces, nos complican un poco la elección. Hoy hablamos con expertos para que arrojen un poco de luz a esta cuestión.

¿Qué es un fotoprotector?

“Son productos cosméticos de aplicación tópica que tienen la propiedad de resguardar la piel de los efectos nocivos de la radiación UV. En su formulación contienen filtros solares que absorben o refractan la radiación ultravioleta, atenuando la acción perjudicial en la dermis”, apunta la Dra. Aurora Garre, medical marketing manager en Isdin Corporate.

Aunque el objetivo inicial era cuidar de la radiación UV (la UVB es muy variable y es la principal causante de la quemadura solar mientras que la UVA, más energética y constante, es responsable del daño solar acumulado), ahora muchos extienden sus capacidades a otras que también influyen en la piel como la luz visible (se asocia a las hiperpigmentaciones) o la infrarroja tipo A (produce estrés oxidativo y contribuye al envejecimiento).

Desde Isdin, reconocen que la fotoprotección debería aplicarse todos los días del año puesto que, en mayor o menor medida, a diario recibimos radiación solar. "Ya sea en las actividades que hacemos al aire libre (somos vulnerables a los UVA, UVB y a la luz visible), como en las que realizamos dentro de casa (los UVA, la luz visible y las radiaciones infrarrojas atraviesan los cristales)”. Otro factor importante es que la piel tiene memoria. “La radiación solar que recibe a lo largo de la vida tiene un efecto acumulativo que provoca efectos perjudiciales con el paso del tiempo”, sostiene la Dra. Garre.

Respecto al índice del factor que debemos utilizar, Juan Luis López, director de marketing de Eau Thermale Avène, reconoce que depende de tu fototipo, de la estación del año y de las horas y de las condiciones en las que que vas a estar expuesta. Su consejo es que “para un uso diario, lo mínimo sería un SPF 15 o SPF 20 y, a medida que nos vayamos acercando a la primavera, incrementarlo a un SPF 30 o un SPF 50+. Sin embargo, en el caso de que ir a la playa o a la montaña, la recomendación ideal sería un SPF 50+”. También deberías tener en cuenta las características de tu cutis, más allá del tono. Es decir, si es graso, mixto, normal o seco, ya que la sensorialidad de la textura hará que te guste más utilizarlo y, por lo tanto, seas disciplinada con su uso.

Heliocare 360º Mineral Tolerance Fluid SPF50, de Cantabria Labs (30,10 €). Con filtros específicos, reparadores y antioxidantes. COMPRAR AQUÍ

Fotoprotector Fusion Water, de Isdin (22,55 €). Fórmula de alta protección, invisible e hidratante. COMPRAR AQUÍ

Protector Solar de Confianza P20 Cara SPF 30, de Riemann (19,50 €). Con filtros orgánicos y una absorción rápida, actúa contra la luz azul, los rayos UVB y los UVA. COMPRAR AQUÍ

Fotomaquillajes, los aliados beauty

Aunque algunos expertos consideran que estas referencias son fotoprotectores a los que añaden pigmentos, Leonor Prieto, farmacéutica y directora científica de los laboratorios La Roche-Posay y L’Oréal Cosmética Activa, otorga esa definición a una crema con color. Ella matiza que “un fotomaquillaje es un producto pensado para dar un efecto más parecido a un make up. Es decir, dejar un cutis más uniforme y con acabado mate, aterciopelado o empolvado, dependiendo de la fórmula”.

Su nivel de protección dependerá de cómo esté formulada la referencia. Pueden contar con un sistema filtrante de amplio espectro, con un arsenal de antioxidantes que neutralicen los efectos nocivos de los radicales libres y, uno de sus puntos fuertes, es que “al contener pigmentos (óxidos de hierro que dan los tonos beis y el dióxido de titanio, en forma de pigmento blanco, que aporta cobertura) te van a resguardar de la luz visible, sobre todo de la luz azul. De hecho, cuanto más oscuro sea el tono y más cobertura tenga, más efectivo será”, recalca Leonor Prieto.

A la hora de seleccionar el tuyo, debes valorarlo por su capacidad de cuidarte del sol (decántate por los filtros de amplio espectro, con un factor alto y, si tiendes a tener manchas y melasma, con una cobertura media-alta), pero también por el acabado (en función de tus preferencias puede ser natural, mate, empolvado…)

Su gran ventaja es que resultan muy cómodos de utilizar pues unen los beneficios de dos productos, del solar y de la base de maquillaje, en un gesto. Además, son compatibles con las cremas de tratamiento que ya contienen un factor de protección. Por otro lado, su manual debe ser como el de un fondo de make up, que no lo reaplicas cada dos horas. Así, aunque su uso está recomendado para el día a día durante todo el año, “si te vas a exponer a un sol intenso o vas a realizar actividades de larga duración al aire libre, es mejor utilizar un protector solar que te permite una reaplicación adecuada”, aconseja la farmacéutica.

B-Protect SPF 50+, de Eau Thermale Avène (14,80 €). Con acción anti-UV, con efecto antipolución y con pigmentos microencapsulados. COMPRAR AQUÍ
Anthelios Mineral One, de La Roche-Posay (26,30 €). Con filtro UV mineral y enriquecido con vitamina E, aporta una cobertura matificante. COMPRAR AQUÍ
Compacto Solar Mineral UVA/UVB 30, de Clarins (37 €). Fluido con color y alta protección que mantiene una acción antioxidante. COMPRAR AQUÍ

Fotocorrectores, los más aplicados

Es un híbrido entre un fotoprotector (con todas las características que ya hemos nombrado) y un despigmentante. La esencial de esta unión es que todos los activos sean compatibles para garantizar la eficacia y la seguridad del producto.

La experta de L’Oréal Cosmética Activa recuerda que en la formación de melanina no solo interviene la radiación solar, también la polución o la inflamación que se produce tras un tratamiento estético. Por eso, se suelen combinar mezclas de activos que evitan estos procesos (como los derivados del resorcinol, la niacinamida, el ácido tranexámico…) con un buen sistema de filtros que, por sí solo, ya previene la pigmentación excesiva de la piel. Es un trabajo en sinergia que aporta un efecto más rápido y duradero.

Pero si lo que buscas es la acción más completa, es importante que también incluya una tecnología antipolución. “Su combinación de antioxidantes y texturas antiadhesión impide que los agentes contaminantes (gases, partículas de metales pesados…) penetren en la piel y activen la formación de radicales libres y, por lo tanto, de más arrugas y manchas”, subraya la experta. ¿Quieres que también resulte efectivo con la radiación visible? “Entonces, elige un fotocorrector con color”.

La idea es utilizarlo a diario, en condiciones normales de radiación, tras un sérum específico y cuando tu objetivo es disfrutar de la protección solar con un extra de cuidado antiaging.

Bio10 Solar Protector Solar Antimanchas UVA-Plus SPF50+, de Bella Aurora (19,94 €). Trata las imperfecciones y previene el estrés oxidativo. COMPRAR AQUÍ
Melascreen UV Crema Ligera SPF50+, de Ducray (16,15 €). Actúa contra las manchas oscuras y el fotoenvejecimiento.
Advanced Brightening UV Defense SPF 50, de Skinceuticals (45 €). Con ácido tranexámico y niacinamida, corrige la hiperpigmentación con filtros UV de amplio espectro. COMPRAR AQUÍ