El incierto y misterioso futuro de Elisabeth de Bélgica, el 'espejo' de la princesa Leonor

La princesa Elisabeth, heredera del trono belga, participaba hace unos días en un desfile militar como homenaje al soldado desconocido. Lo hacía con su correspondiente uniforme y como parte de la formación que está realizando desde el pasado septiembre en la Real Academia Militar. Su participación en este evento militar ha vuelto a poner sobre la mesa la pregunta de cuál será su próximo paso, ya que el curso acaba en apenas dos meses. Pero desde el Palacio Real se está tratando con absoluta discreción este asunto. Académico, militar o laboral, no lo sabemos, pero sí será importante y su decisión -o la de sus padres- genera un gran interés, dado que estamos hablando de la futura reina de los belgas. Y no solo eso, sino que también la podemos considerar una especie de 'espejo' para la princesa Leonor, ya que parece estar siguiendo sus pasos. Pero, de momento, su futuro más inmediato es totalmente incierto y todo un misterio.

Así nos lo confirma Wim Dehandschutter, un conocido periodista belga especializado en la familia real. La respuesta oficial que da Palacio a la pregunta de la prensa es la misma: "Es muy pronto para comunicar cualquier cosa sobre este tema. Su entrenamiento en el ejército acaba a finales de julio". Es decir, que hay un plan, pero secreto todavía, al menos de cara a los medios de comunicación. Lo que sí pueden adelantar es que participará en el desfile militar que tiene lugar con motivo del Día Nacional de Bélgica, ya que el curso termina el 31 de julio y esta fiesta es el día 21. Lo hará, por primera vez, mezclada con los miembros del ejército y las fuerzas armadas y no en el palco, donde siempre suele estar, junto a sus padres y sus hermanos.

Ahora bien, con esta respuesta oficial y a falta de poco más de dos meses para que termine su formación militar, se plantean ahora dos preguntas. Por un lado, si se tomará un año sabático, una posibilidad que ha estado sobre la mesa en los últimos años. "La reina Matilde me dijo una vez que espera que tanto Elisabeth como sus otros hijos tengan la oportunidad de descubrir el mundo y hacer trabajo voluntario en países del tercer mundo, igual que hizo ella en su adolescencia, cuando trabajó como voluntaria en los barrios marginales de El Cairo a la edad de 18 años", nos cuenta Wim Dehandschutter. Es solo una de las pistas que se tienen que apuntan a que, efectivamente, la heredera podría estar un año dedicada a este tipo de actividades, haciendo un alto en sus estudios. Una posibilidad que no nos es del todo completamente desconocida en la actualidad, ya que también cobra fuerza en el caso de Amalia de Holanda.

La otra pregunta es si, se tome año sabático o no, estudiará en la universidad. Algo que, al menos al rey Felipe sí le gustaría que hiciera, tal y como nos confirma Wim: "Fueron dos de los mejores años de su vida, nos dijo una vez". Y aquí hay una opción muy probable, que es que la princesa Elisabeth estudie en el extranjero. No solo para seguir los pasos de su padre, que pasó por centros tan prestigiosos como Oxford o Stanford, sino porque "evitaría así un montón de suspicacias y polémicas en el país, al elegir, por ejemplo, una universidad de habla francesa en lugar de una alemana, o una católica en lugar de una laica", nos comenta Dehandschutter. Se supone que la heredera estudiaría Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales -exactamente igual que hizo el rey Felipe de los belgas en Stanford-, lo que le daría una base muy sólida de conocimiento para su futuro como reina.

Ahora bien, por un lado están las opciones lógicas e ideales teniendo en cuenta su próximo papel y, por otro, las que ella contempla. Porque una de las grandes pasiones de la princesa Elisabeth es la pintura y, aunque sabe que no entra en los planes familiares ni institucionales que enfoque su vida al arte, a ella sí que le gustaría poder dedicar parte de su tiempo a pintar. Así que no hay que descartar que, como la actual reina de Dinamarca, Margarita, o como hiciera en su momento la reina Elisabeth de Bélgica, su tatarabuela -y por la que se llama así-, combine su labor monárquica, su deber, con el arte, su pasión.

Lo que sí es importante es recordar que los reyes han renunciado a la paga estatal que le hubiera correspondido a su hija mayor al cumplir la mayoría de edad. Quieren que se forme y se prepare para asumir el papel institucional que va ligado a esa asignación. Un gesto que, junto a la carrera militar, podría ser el siguiente paso de referencia para la princesa Leonor, después de que haya 'copiado' uno de los más importantes, realizar el Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College de Gales.