Kate se quita el traje de princesa para vacunarse: vaqueros, camiseta y cara lavada

Feliz, esperanzada, agradecida y con su look más terrenal. Así se ha mostrado Kate Middleton este sábado 20 de mayo al recibir su primera dosis de la vacuna contra el coronavirus.

"Ayer recibí mi primera dosis de la vacuna COVID-19 en el Museo de Ciencias de Londres. Estoy muy agradecida a todos los que participan en el lanzamiento de la vacuna. Gracias por todo lo que están haciendo", ha escrito en redes sociales, un mensaje muy parecido al que publicó su marido, el príncipe Guillermo, cuando el pasado 20 de mayo recibió su correspondiente dosis: "El martes recibí mi primera dosis de la vacuna COVID-19. A todos los que trabajan en el lanzamiento de la vacuna: gracias por todo lo que han hecho y continúan haciendo", escribió el hijo del príncipe Carlos de Inglaterra.

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J. R. López

Kate, al igual que Guillermo, también ha querido inmortalizar el momento, no solo porque la vacuna supone el paso definitivo para cambiar esta página sombría de nuestra historia y volver de nuevo a la antigua normalidad, sino porque también es consciente de la gran influencia que su persona ejerce en gran parte de la ciudadanía de su país y del resto del mundo donde cuenta con legiones de fans. Con este gesto, Kate anima a todos a vacunarse y transmite confianza en aquellos que puedan sentir cierto miedo o recelo a recibir una dosis.

En la foto mostrada, Kate Middleton se ha despojado de toda la pompa que suele rodearla en sus actos oficiales, para convertirse en una ciudadana más. Ni rastro de vestidos o abrigos elegantes, tocados, sofisticados recogidos o maquillaje. Kate ha lucido una simple camiseta blanca de manga corta combinada con unos vaqueros. Su melena aparece en su modo más natura, suelta y sin producción, al igual que su rostro, en el que no se aprecia ni una pizca de maquillaje, al menos en las partes del mismo que nos deja ver la mascarilla que usa la duquesa.

Los duques de Cambridge han mostrado desde el principio un fuerte compromiso con todo lo que ha rodeado a la pandemia y con la salud en general. Hace unas semanas, Guillermo y Kate visitaron un centro juvenil en Wolverhampton, cerca de Birmingham, para mostrar su concienciación con la salud mental. Ambos son conscientes de que son unos privilegiados y de que muchos ciudadanos se han tenido que enfrentar a encierros muy incómodos durante la pandemia y a situaciones económicas muy mermadas que han podido hacer mucho daño a su estado de ánimo.