Todos los amores de Lolita: del flechazo con Serrat a su último marido

Orgullosa de sus genes y de su familia, de ser hija de dos grandes de la música, como Lola Flores y el Pescaílla, con la música y la interpretación como bandera, Lolita es uno de nuestros tesoros nacionales. Sin que le pese el apellido, ha demostrado a lo largo de los años su propio talento en una fructífera carrera que aún sigue viva en la televisión y en los escenarios.

Pero la trayectoria de la intérprete de 'Sarandonga', más allá de los discos, las películas y los dramas familiares, también puede recorrerse a lo largo de los romances fugaces y de los amores más serios que han ido salpicando su vida.

"Yo me enamoré con once años y no me hice ni caso, pero yo sé que me quiere mucho como a toda mi familia". Así presentaba en el programa 'Tiritrán' de TVE Lolita a su primer gran amor, Joan Manuel Serrat. Maruja Torres describiría en uno de sus artículos como un “amor platónico y sin esperanza” aquel flechazo entre el rompecorazones nacido en el Mediterráneo y la hija de la Faraona.

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Entre sus primeros escarceos amorosos podemos encontrar a Manolo Lapique, el hermano de Cari Lapique, y el torero Sebastián Palomo Linares, antes de que viviera un noviazgo más serio con el playboy y especialista de cine Antonio Arribas, que más tarde también tendría una aventura con su amiga Carmina Ordóñez.

Precisamente fue cuando el marido de esta última, Paquirri, se separó de ella, cuando surgió la chispa entre el torero y Lolita, que ha confesado en numerosas ocasiones que ella estuvo muy enamorada de él. Por eso, cuando Isabel Pantoja se cruzó en el camino de su relación, lo pasó muy mal.

Muchos años después, la Pantoja reveló en 'Supervivientes' cómo fue el momento en el que conoció al diestro. "Fue en mayo de 1980 cuando José María Manzanares me invitó a una corrida, pero yo no sabía quién toreaba", dijo la intérprete de ‘Marinero de luces’. “Su mirada se cruzó con la mía y… yo no sé lo que me entró por el cuerpo”.

Así llegamos a 1983 cuando Lolita encontró el amor de nuevo junto al argentino Guillermo Furiase. Cuando decidieron darse el 'sí, quiero', ella tenía tan solo 25 años. Aquella boda fue uno de los grandes acontecimientos sociales de la época y dejó un hecho histórico cuando, ante el gentío allí congregado, Lola Flores exclamó aquel legendario "¡si me queréis, irse!".

En 1988 nació su primera hija, Elena, y en 1991 lo hacía el segundo de sus hijos, Guille, cuatro años antes de que el matrimonio se separara. Fue entonces cuando se le adjudicó un romance con Fran Rivera sobre el que corrieron ríos de tinta.

Cuando ella tenía 37 años y él era un joven torero de 22, las portadas de las revistas de la época les adjudicaron un discretísimo idilio que no se terminaría de confirmar hasta 2011. Fue entonces cuando su amiga, la periodista Charo Vega, confirmó el idilio, del que ambos no han querido nunca contar detalles.

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M. Guerrero

Otro confusa aventura es la que la relaciona con el popular presentador Juan y Medio. Soltero empedernido, este finalmente quiso desmentir los rumores de que hubieran estado juntos, asegurando durante una entrevista en Canal Sur que "ese soniquete lleva ya tantos años que, personalmente, me aburre y quería dejarlo claro. No tengo nada que ver con esa historia".

Lolita, ahora sí, encontró nuevamente ocupante para su corazón con el cambio de siglo junto al actor cubano Pablo Durán y se casaron en 2010. Pero en 2015 se separaban, no sin polémica.

Después de que Lolita apareciera en las revistas diciendo que le dolía ver a su ex con otra mujer, este concedía una entrevista a la revista 'Semana' en la que acusaba a la cantante de haberle echado de su casa. "Me sorprende que le duela verme con otra. Fue ella quien me echó", declaraba el actor antes de confesar que "nos casamos por dinero. Lo pagaban muy bien. Pero nos queríamos un montón".

Prueba de ese amor que se tenían es que Lolita y él llegaron a convivir tres años con el anterior marido de ella, Guillermo Furiase, y sus dos hijos, después de que este sufriera un ictus. Así lo relataba en el programa 'Un año de tu vida' junto a Toñi Moreno.

"Me lo llevé a mi casa porque yo vivía con mi último marido, que se portó chapó porque me dijo: 'Por supuesto te lo traes'. Vino para dos meses y se quedó tres años. Así que yo vivía con dos maridos y a ninguno envenené. Los dos están sanos y salvos, y de los dos me he divorciado", decía entonces con su habitual sentido del humor. Desde entonces, y como le dijo a Pablo Motos en 'El hormiguero', "estoy soltera y libre como los taxis".