Sin saludo al público y tirando de abanico: la recepción de los Reyes en la Almudaina

Uno de los actos que don Felipe y doña Letizia modificaron cuando accedieron al trono es el encuentro nocturno en el Palacio de la Almudaina. Don Juan Carlos y doña Sofía solían celebrar una cena en el interior del edificio a la que tan solo asistían las autoridades baleares; los actuales Reyes modernizaron el evento convirtiéndolo en una breve recepción con besamanos en el patio de palacio y un posterior cóctel. También modificaron la lista de invitados, ya que incluyeron a representantes de la sociedad civil.

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Este año, don Felipe y doña Letizia presidieron la recepción acompañados por doña Sofía, lo que se ha convertido ya en una tradición. Lo que cambió en esta ocasión fue su llegada a la Almudaina. Y es que desde 2014, los Reyes se daban un auténtico baño de masas con los curiosos que se habían acercado para verlos en primera persona. Saludos, besos, selfies... Felipe VI y su esposa se entregaban al público allí congregados dejándonos con escenas para el recuerdo.

Sin embargo, esta vez la cosa fue distinta. Al bajarse de su coche, el trío real saludó al público, pero no se acercó a él en ningún momento. ¿El motivo? Dos grupos de manifestantes se habían dado cita en las puertas de a Almudaina. Por un lado, y según fuentes policiales, 150 partidarios de la república pedían un referéndum para decidir el futuro de la Corona; por el otro, 300 monárquicos defendían a la institución con gritos de "¡Viva el Rey!".

A pesar de lo que se vivía fuera, el acto se desarrolló con total normalidad en el interior. Suegra y nuera volvieron a escenificar su buena relación, compartiendo confidencias y sonrisas. Buena prueba de las altas temperaturas que se viven en toda la península fue la reina Sofía, que en un momento dado del besamanos sacó su abanico para mitigar el calor.

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A la recepción asistieron cerca de 450 personas, entre quienes se encontraban la presidenta autonómica, la socialista Francina Armengol; el obispo de Mallorca; la secretaria de Estado de Turismo, Isabel Oliver; la delegada del Gobierno en Baleares, Rosario Sánchez; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Baleares, Antoni Terrasa; el fiscal jefe, Bartomeu Barceló; y los expresidentes autonómicos Francesc Antich y José Ramón Bauza.

La recepción puso fin a la agenda de las dos Reinas en Mallorca. A don Felipe todavía le queda un acto en la isla: entregar la Copa del Rey de Vela este mismo sábado. Tras esto, el destino de los Reyes es un auténtico misterio. Todo apunta a que, como años anteriores, desaparecerán para disfrutar de sus 'vacaciones privadas' y no los volveremos a ver hasta septiembre.