Fallece el hijo de la supermodelo Stephanie Seymour de una sobredosis accidental a los 24 años

Sobredosis accidental de medicamentos. Esta fue, según el comunicado emitido por la familia, la causa del fallecimiento de Harry Brant, el hijo de la modelo Stephanie Seymour y de su marido, el multimillonario empresario Peter Brant.

"Nos entristecerá para siempre que su vida se haya visto truncada por esta devastadora enfermedad", añadía la declaración con relación a su larga batalla contra las adicciones. "Logró muchas cosas en sus 24 años, pero nunca tendremos la oportunidad de ver cuánto más pudo haber hecho Harry. No era solo nuestro hijo, también era un hermano maravilloso, un nieto, tío y amigo cariñoso".

Descrito por los suyos como "un alma creativa y poderosa que trajo luz a los corazones de mucha gente", estaba previsto que completara su periodo de rehabilitación antes de embarcarse en un papel más creativo este año en la revista 'Interview', propiedad de su padre.

Brant y Seymour tienen otros dos hijos juntos, Peter II, de 27 años, y Lilly Margaret, de 16. Harry también tenía un hermanastro mayor, fruto del primer matrimonio de Seymour con el guitarrista Tommy Andrews, y cuatro más del matrimonio de su padre con Sandra Simms.

Stephanie Seymour es una actriz y modelo que ha aparecido en las portadas de 'Vogue' o 'Sports Illustrated', y junto a Kate Moss y Naomi Campbell estuvo entre las supermodelos más famosas de finales de los 80 y principios de los 90. Antes de casarse con Brant, tuvo una relación con el cantante de Guns N' Roses, Axl Rose.

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Harry y su hermano Peter fueron a menudo considerados como la versión masculina de las ricas hermanas de la alta sociedad Paris y Nicky Hilton, y frecuentemente se les veía en primera fila en desfiles de moda y fiestas exclusivas en Nueva York, como la gala MET a la que asistió con tan solo 16 años.

El fallecido joven siguió los pasos de sus padres en el mundo de la moda, escribiendo una columna para una de las publicaciones de su progenitor cuando era adolescente, antes de intentar hacer carrera como modelo. Junto a su hermano Peter fundó además una línea de maquillaje unisex para MAC Cosmetics, bautizada como The Brant Brothers.

Harry disfrutó de una infancia privilegiada, pero comenzó una espiral descendente en 2016, cuando fue acusado de robo, posesión de drogas y agresión a un agente de policía después de negarse a pagar un taxi en Connecticut.