'El cuento de la criada': lo que une y separa a heroína y villana de la serie más feminista
‘El cuento de la criada’ muestra a dos mujeres fuertes que correrán por el Emmy este año. Aunque de trayectoria profesional impecable, en la vida real ambas tienen poco en común
Esta semana, Vanitatis ha elegido a las cien mujeres más influyentes de nuestro país. Muchas de ellas, de Carmen Calvo a Ana Rosa Quintana, han opinado sobre el movimiento feminista que ha tenido lugar en los últimos meses. Y en las entrañas de ese movimiento, de alguna manera, está ‘El cuento de la criada’, cuya segunda temporada acababa por todo lo alto: un fin de fiesta viral en redes que aseguraba el éxito de una tercera entrega que ya da que hablar. Feminismo a base de exponer la tortura y las desdichas de una serie de personajes femeninos al límite en una sociedad totalitaria como Gilead, en la que muchas de ellas son simplemente vientres para engendrar niños.
En dicha serie trabajan hombro con hombro dos de las actrices más punteras y profesionales de la industria del entretenimiento actual: Elisabeth Moss e Yvonne Strahovski, ambas de 35 años. La buena y la mala, a grandes rasgos. El ying y el yang o Abel y Caín. Las dos representan los lados más antagónicos de un futuro distópico que nos muestra una sociedad machista dominada por leyes misóginas. Gracias a este poderoso mensaje, ambas se han convertido en un referente feminista y en portavoces de una ficción que, si se examina al detalle, no dista mucho de las leyes que aún imperan en países radicales. Así las cosas, los fans de la historia creada por HBO insisten en unir a dichas ‘heroínas’ fuera de la pequeña pantalla. Algo que, a bote pronto, parece complicado.
En la historia, Moss (Offred) viste de rojo, lo que la distingue como una ‘criada’, mientras que Strahovski (Serena) lo hace de verde, lo que la convierte en una ‘esposa’. El rojo se interpreta como una representación de la sangre en la sociedad, que viene a simbolizar el cometido fértil de las esclavas; el azul, sin embargo, representa la figura pura de la Virgen María. Este es el paradigma social que impera en el ficticio país de Gilead, anteriormente Estados Unidos.
Reconocidas por crítica y público
Ambas actrices están posicionadas para obtener los galardones más prestigiosos de la profesión. De hecho, este año se encuentran nominadas al premio Emmy por ‘El cuento de la criada’. Moss como actriz principal en la categoría de drama; Strahovski como actriz de reparto, así que no competirán en la misma categoría. Moss ya se llevó este premio el pasado año, cuando el formato arrasó en la gala de esos premios obteniendo ocho de las 11 nominaciones a las que se presentaba. A Strahovski, por el contrario, parece que se le resisten las mieles del reconocimiento internacional.
Fuera, estrictas compañeras
Cuando las luces del plató se apagan, la relación entre ambas es abierta y estrictamente profesional. No existen imágenes de ellas compartiendo un café o un paseo. Es difícil, de hecho, encontrar una imagen en la que ambas se encuentren sentadas juntas. Esto no viene a demostrar una mala relación personal y se podría deber, en parte, a la extraña situación que las vincula fuera y dentro del guion establecido: Strahovski encarna en ‘El cuento de la criada’ un modelo de estado teocrático y elitista, justo el que representa la Iglesia de la Cienciología de la que forma parte Moss en la vida real. Este punto alejaría a la protagonista del papel que interpreta en la ficción, pese a que el público la vincula con él.
Los tabloides norteamericanos ya han escrito sobre la relación de ambas. ‘Parade’, de hecho, le preguntó abiertamente a Strahovski cómo era trabajar con Moss. Esta se limitó a ser educada y comentó: “Es maravilloso, le tengo tanto respeto como al resto del equipo. Todos son maravillosos y aportan una chispa única a la serie”.
Según un estudio llevado a cabo por el Instituto Georgetown para la Mujer, la Paz y la Seguridad, España se encuentra en el quinto lugar en el ranking de las mujeres que viven más libres y con mayores derechos. Eso quizá nos acerca de una forma crítica a estas dos actrices y a una serie que ha marcado el año más feminista del siglo XXI.
Esta semana, Vanitatis ha elegido a las cien mujeres más influyentes de nuestro país. Muchas de ellas, de Carmen Calvo a Ana Rosa Quintana, han opinado sobre el movimiento feminista que ha tenido lugar en los últimos meses. Y en las entrañas de ese movimiento, de alguna manera, está ‘El cuento de la criada’, cuya segunda temporada acababa por todo lo alto: un fin de fiesta viral en redes que aseguraba el éxito de una tercera entrega que ya da que hablar. Feminismo a base de exponer la tortura y las desdichas de una serie de personajes femeninos al límite en una sociedad totalitaria como Gilead, en la que muchas de ellas son simplemente vientres para engendrar niños.