El príncipe Harry confiesa que se planteó 'salir' de la familia real
El hijo de Lady Di y Carlos de Inglaterra ha confesado que en el pasado se planteó vivir como un ciudadano más. Lo ha dicho en una entrevista que ha publicado 'The Mail on Sunday'
El príncipe Harry no ha tenido una vida sencilla: la muerte de su madre a tan temprana edad ha marcado el resto de su vida, hasta que ahora, con el paso de los años, parece haber encontrado la estabilidad. Más aún si finalmente la relación con su novia, la actriz Meghan Markle, termina en boda y Harry sienta definitivamente la cabeza.
En la charla mantenida con The Mail on Sunday, Harry, de 32 años, explica que finalmente decidió quedarse en la 'La Firma' -como se conoce a la monarquía británica- por respeto a su abuela, la reina Isabel II, y también para intentar labrarse un futuro y un papel propio.
El príncipe hizo estas declaraciones a Angela Levin, la misma periodista que la pasada semana publicó una entrevista con él en el semanario estadounidense Newsweek, en la que el joven aseguró que ningún miembro de la familia real desea ser rey o reina, pero que se hace por el bien general del Reino Unido: "Si yo fuera el heredero, cumpliría con mi papel por deber", declaraba entonces Harry, aunque lo que deseaba era hacer una vida normal como un ciudadano cualquiera.
En esa entrevista, Harry confesó también que durante años estuvo cerca del colapso emocional debido en buena medida al hecho de no haber procesado la muerte de su madre, fallecida con su pareja de entonces, Dodi Fayed, en un accidente de tráfico en París en 1997, cuando él tenía doce años.
El quinto en la línea de sucesión al trono también confiesa que la mejor época de su vida fue su década (a la que él denomina "de escape") en el Ejército, cuando se mezcló "con gente de todas las procedencias" y fue "parte de un equipo". De hecho sintió un poco de frustración cuando en 2007 tuvo que abandonar una misión en Afganistán por motivos de seguridad después de que se revelara su presencia allí.
Harry, que hace unas semanas confesó que recientemente tuvo que solitar ayuda psicológica para superar la muerte de Diana de Gales, confiesa estar satisfecho con su labor para organizaciones benéficas, en las que sigue la estela de su madre. El príncipe, vinculado a entidades de ayuda a soldados heridos en combate y de salud mental, explica que los miembros de la familia real, incluido su hermano, Guillermo -segundo en la línea de sucesión-, no quieren ser sin más 'un puñado de famosos': "Sentimos pasión por nuestras organizaciones de caridad y han sido elegidas porque están en el camino que me ha mostrado nuestra madre", afirma.
Parece que tras años de inmadurez y luchas internas, Harry va aceptando su posición. La periodista le describe, "no como un quejica sino como un soldado herido".
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