Consigue un cuarto de baño más eco y sostenible con Ikea y estos trucos

Hay muchas cosas que podemos hacer para conseguir que nuestra casa sea más sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Algunas de ellas además nos ayudan a ahorrar un poco, como apagar las lámparas al salir de una habitación o cerrar los grifos cuando no sea necesario tenerlos abiertos.

Esto es solo el principio, porque hay muchas cosas más que podemos hacer para contribuir a un mundo más sostenible, muchas de ellas sin tener que salir de nuestro cuarto de baño. Puede parecer complicado, por suerte firmas de decoración como Ikea nos ayudan a que resulte un poco más sencillo.

Por ejemplo, nos instan a que nuestros textiles de baño sean siempre elaborados a partir de materiales renovables, no solo nuestras toallas, que son los primeros que nos vienen a la mente, también las alfombras, las cortinas de ducha e incluso las pantuflas que usamos para salir de la bañera.

Así, mirando las etiquetas de las prendas que escojamos podremos asegurarnos de que cumplimos lo que nos proponemos. Apostando por toallas de algodón, como las del modelo Vagsjön, que puedes conseguir por 4 euros, estarás invirtiendo en piezas que proceden de fuentes más sostenibles, cultivado con menos agua y pesticidas o incluso de material reciclado.

Escoger unos muebles adecuados también pueden contribuir a conseguir que nuestro hogar sea un poco más sostenible. Por eso si estás buscando complementos para tu cuarto de baño, seleccionar los que están hechos de bambú, por ejemplo, además de conseguir un ambiente más ligero, pueden ayudarte a cumplir tus propósitos.

La gama Ragrund cumple con estas características, y su estantería de esquina es una solución perfecta para ganar un poco de espacio de almacenamiento extra cuando no nos sobra mucho hueco; conseguirás tres baldas extra por 20 euros.

No debemos olvidar el resto de elementos, decorativos y prácticos que forman parte de nuestra casa, tanto los que empleamos para guardar nuestros cosméticos, que nos ayudan a mantener en orden la estancia.

Apuesta por cestas artesanales o por cajas como la del modelo Saxborga por 15 euros que, a pesar de estar hecha de plástico, tiene una tapa de corcho, que es un material renovable y su espejo está elaborado sin el empleo de plomo. Con algunos pequeños cambios, como estos trucos que Ikea pone a nuestra disposición, tendremos, poco a poco, un hogar más ecológico.