A Kate Middleton se la comen a besos en su último acto oficial: todas las fotos

"Nuestra perra se va a enfadar mucho. Ella va a estar luego como: "¿Dónde habéis estado?”. Esas eran las palabras de Kate Middleton cuando ha conocido a Alfie, un cachorrito de la raza cockapoo que participa en las terapias de recuperación de enfermos, y que se ha comido a besos a la duquesa de Cambridge. El príncipe Guillermo y su esposa no han dudado en mostrar su pasión por los animales en su acto de este jueves, el segundo para Kate desde que empezó el año, y en el que la pareja se ha vuelto a mostrar tan cercana y espontánea como siempre.

Esta tarde a primera hora, los duques aparecían en el Clitheroe Community Hospital, ubicado en Lancashire, para conocer los desafíos únicos que enfrentan los proveedores de salud rural ante la pandemia y comprender cómo se apoya desde los centros a la salud mental de los pacientes. Y ha sido durante su recorrido por el hospital cuando los duques han conocido a Alfie, que ha hecho las delicias de la pareja. Ni Guillermo ni Kate han dudado en sostener al cachorrito, y ella, de forma cariñosa, le ha dicho: "Eres muy dulce. Haces juego con mi abrigo".

Efectivamente, la duquesa lucía un total look camel, el mismo color que Alfie, en el que destacaba un abrigo largo con doble botonadura de la firma española Massimo Dutti, que ya le habíamos visto en el pasado. Debajo llevaba un nuevo conjunto de Iris & Ink en lana merino formado por falda plisada de largo midi y jersey de cuello alto. Un dos piezas que tiene también en verde y que parece que le gustó tanto que no dudó en comprarlo también en marrón. También lucía una cartera de mano de Metier London, valorada en 1.100 euros, unas botas de ante y pendientes de la firma Missoma.

Fue en noviembre de 2020 cuando los duques se enfrentaron a la pérdida de su perro Lupo y lo comunicaban vía Instagram. "Muy tristemente nuestro perro, Lupo, ha fallecido. Ha estado en el corazón de nuestra familia y lo echaremos mucho de menos". Unas palabras que firmaban con las iniciales de los duques de Cambridge, W y C, para darles un sello más personal. Lupo era un cocker spaniel que le fue entregado a la pareja en 2011, pocos meses antes de su enlace matrimonial, convirtiéndose en su mejor amigo y su bebé antes de la llegada de George en julio de 2013.

James Middletton, el hermano de la duquesa y amante de los perros, fue quien les entregó a Lupo, y mostraba también su pena en las redes sociales. "Nada puede prepararte para la pérdida de un perro", escribía. "Para aquellos que nunca lo han tenido, puede ser difícil comprender la pérdida. Sin embargo, para aquellos que han amado a un perro, saben la verdad: no es solo una mascota; es un miembro de la familia, un mejor amigo, un compañero fiel, un maestro y un terapeuta. Muchas personas a lo largo de los años me han hablado sobre el dolor de perder un perro y, para la mayoría, en casi todos los sentidos es comparable a la pérdida de un ser humano. El dolor que sentí por perder a mi primer perro Tilly en 2017 todavía duele y al escuchar la noticia sobre Lupo me trajo una ola de emociones".

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R. Riaño

El hermano de Kate nunca ha ocultado lo importantes que han sido las mascotas en su vida. Los perros le ayudaron a lidiar y superar sus problemas de depresión, de los que llegó a hablar abiertamente para intentar echar una mano a personas que se encontraran en su misma situación y para las que era difícil ver la salida, una sensación que él conoce muy bien. De hecho, es el embajador de Pets as Therapy, una organización benéfica que utiliza a los canes como terapia en pacientes de hospital, centros de acogida o colegios.

Por eso no es de extrañar que fuera él mismo quien les entregó a los Cambridge la nueva perrita que tienen ahora y de la que Kate ha hablado al conocer a Alfie. Se trata de otra cocker spaniel de la que no ha trascendido el nombre.