Cinturón Burberry y zapatos de Prada: el look de cine (y de lujo) de Letizia en Tudela

La reina Letizia se ha presentado este viernes en Tudela oscura, como el día, casi en un tono monocorde con el cielo que la ha recibido en esta localidad de Navarra, hasta donde se ha desplazado para asistir a la 21ª edición del Festival de Cine Ópera Prima. Un look que quizá no se esperaba para una cita matinal. Pero hay que reconocer que el diseño que ha escogido es uno de los más aplaudidos de su armario. Una prenda que ha combinado con complementos de lujo: cinturón Burberry, zapatos de Prada y una cartera ya conocida para coronar su look.

Hablamos de su vestido negro de COS, un diseño de lana de escote asimétrico drapeado, largo midi y unos originales puños largos que se pueden considerar su seña de identidad. La firma es una de las que pertenecen al conglomerado de la sueca H&M, al que no es la primera vez que recurre, y su precio en su momento era de 125 euros. La Reina lo estrenó en febrero de 2020 durante la entrega de los Premios Nacionales de Investigación 2019, obteniendo muy buenas críticas. De ahí que no dudara en rescatarlo para dar por comenzada su agenda real en solitario en este 2021. Y, como ven, no hay dos sin tres.

La diferencia con las otras dos ocasiones y que hacía que el look este viernes fuera diferente ha sido el calzado. Tanto en su estreno como la siguiente puesta, la reina Letizia lo combinó con unas botas de caña alta y ante negro firmadas por Steven Madden. Pero esta vez, por no darle un toque tan invernal y -suponemos- tratarse de un evento de mañana, ha llevado las piernas al aire y sus zapatos negros de Prada, un modelo con altísimo tacón al que hace unos meses, como ha hecho con otros de su zapatero, añadía una pequeña plataforma para hacerlos más cómodos.

El cinturón y la cartera también tienen historia. El primero es de la firma Burberry y no se puede negar que es uno de los complementos favoritos que tiene en su armario, puesto que lo ha utilizado en infinidad de looks. De tipo arnés y en negro, consigue el efecto deseado: ceñir el talle transformando una silueta rectángulo en un suave reloj de arena. Pero también es perfecto para darles otro aire a sus prendas, desde un vestido monocolor, rompiendo la linealidad de la imagen, hasta un conjunto de falda y top que consiguen un toque extra gracias a él.

Y si el cinturón tiene ya solera y experiencia en el vestidor de la reina Letizia, la cartera escogida para coronar su look en Tudela no tiene menos. Se trata de una cartera de mano de Hugo Boss que la reina Letizia estrenó en abril del año 2013 y que, ocho años después, vemos que sigue perfecta para su uso. Durante este tiempo, la ha rescatado de cuando en cuando. Es uno de esos complementos a los que no recurre con asiduidad, pero de los que no se olvida y a los que da una nueva vida cada cierto tiempo.

El toque de color llegó a través de dos detalles -pequeños, eso sí- del look. Por un lado, los pendientes, ya que Letizia ha escogido unos aros de plata rodeados de circonitas de la firma Coolook, y que suele ponerse cuando lleva ropa más oscura. Al ser de un tono tan claro, iluminan el rostro y el outfit en general. Y, por otro lado, no ha faltado ese punto dorado que siempre vemos en su dedo índice, gracias al anillo de forma irregular y chapado en oro de la firma Karem Hallan. Una de las piezas del joyero de Letizia cuyo origen sigue siendo un misterio.

Y, ya hablando de la cita que la ha llevado este viernes a Tudela, no hay duda de que la reina Letizia no podía rechazar la invitación, teniendo en cuenta que era para apoyar la que es una de sus grandes pasiones, el cine. Además, durante la edición del Festival Ópera Prima se homenajeaba a Fernando Fernán-Gómez, Juan Antonio Bardem y Luis García Berlanga, de quien se ha confesado ya seguidora en varias ocasiones. Doña Letizia, además, ha participado en la entrega de premios de esta edición, donde ya hemos visto que las distancias interpersonales empiezan a dejar paso otra vez al contacto físico.

La expectación en la localidad navarra desde primeras horas de la mañana era máxima y la Reina ha sido recibida por multitud de vecinos, con aplausos y numerosos piropos, gestos habituales ya en cada una de las citas a las que acude, sola o acompañada del rey Felipe.